En una jornada que prometía ser dorada para México, las esperanzas de Alejandra Orozco y Gabriela Agúndez en los Clavados Sincronizados Plataforma 10 metros en los Juegos Olímpicos de París 2024 se desvanecieron cuando el sueño de una medalla quedó fuera de alcance. Las clavadistas mexicanas, que habían mostrado un desempeño sobresaliente en Tokio 2020, se vieron atrapadas en una jornada decepcionante y terminaron en un distante quinto lugar.
Desde el inicio de la competencia, el dúo mexicano enfrentó dificultades. En su primer clavado, Orozco y Agúndez recibieron una calificación de 47.40 puntos de los jueces, un inicio que no presagiaba un resultado prometedor. En el segundo clavado, la situación no mejoró, ya que Gabriela Agúndez entró un poco corta, resultando en una acumulación de 94.80 puntos para ese momento.
El tercer clavado mostró una ligera mejora, con México sumando 162.30 puntos generales, que resultó ser la mejor ejecución del día para las mexicanas. Sin embargo, la estabilidad y confianza que se esperaba no se materializó en los últimos dos clavados. Ale Orozco, a pesar de su experiencia, sucumbió ante los nervios, lo que se tradujo en errores significativos que impactaron negativamente en la puntuación final.
Con un total de 297.66 puntos, México se quedó a seis unidades del tercer lugar, que fue para Gran Bretaña. Los resultados también reflejaron la superioridad de las canadienses, quienes superaron a las mexicanas con 299.22 puntos en sus cinco ejecuciones, demostrando que las expectativas de medalla para México estaban fuera de su alcance esta vez.
El oro fue para China, que dominó la competencia con una actuación impecable que le otorgó 359.10 puntos. Corea del Norte se llevó la medalla plateada con 315.90 puntos, mientras que Gran Bretaña, con un sólido último clavado que recibió calificaciones de ocho y medio y nueve, se adjudicó el bronce con 304.38 puntos.
Este resultado marca una notable diferencia respecto a la actuación de Orozco y Agúndez en Tokio, donde obtuvieron una medalla de bronce. Sin embargo, el deporte es impredecible y, a pesar de los tropiezos, las clavadistas mexicanas siguen siendo figuras prominentes en su disciplina y tienen aún mucho por ofrecer en futuras competiciones.
La decepción en París será un capítulo más en la carrera de estas atletas, quienes seguramente regresarán con renovada determinación y fuerza para afrontar nuevos desafíos y demostrar nuevamente su calidad en el mundo de los clavados.
Juan Pablo Ojeda