Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, se comprometió este martes a ofrecer una «nueva visión» en la investigación sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, con el objetivo de avanzar en la localización de los jóvenes, abrir los archivos del Ejército y castigar a los responsables. En su conferencia matutina, Sheinbaum expresó que no se trata de «entrar de nuevo a un esquema de decir una cosa o la otra», sino de buscar nuevos lugares de investigación y revisar las carpetas de casos con un enfoque renovado.
Este compromiso se hizo durante la primera reunión de la mandataria con los padres de los estudiantes desaparecidos, quienes se mostraron optimistas sobre la reunión, calificándola como un «buen inicio». Este encuentro marca un importante paso, tras los años de diálogo roto con el expresidente Andrés Manuel López Obrador, quien no cumplió su promesa de resolver el caso. «La idea es no confrontarnos, sino buscar las salidas», señaló Sheinbaum, quien manifestó su apoyo a las cartas enviadas por López Obrador, en las que se exigía la resolución del caso.
Un punto clave del encuentro fue el acuerdo para que la presidenta enviara una carta al Ejército, solicitando la entrega de los 800 folios de información que aún faltan para avanzar en las investigaciones. Esta acción es crucial, ya que según la Comisión de la Verdad, las autoridades de distintos niveles, incluyendo el Ejército, están implicadas en lo que se considera un “crimen de Estado”.
En línea con este compromiso, los padres de los normalistas informaron que Sheinbaum también se comprometió a insistir en la extradición de Tomás Zerón de Lucio, exdirector de la extinta Agencia de Investigación Criminal (AIC), acusado de ocultar pruebas y torturar a testigos en el caso. La mandataria reiteró su firme posición al afirmar que la carpeta de investigación no se cerrará «hasta que se encuentren a todos los jóvenes».
Además, Sheinbaum aseguró que un nuevo equipo de trabajo está revisando los instrumentos de investigación disponibles con el fin de realizar más detenciones y garantizar que la verdad y la justicia prevalezcan. “Vamos a seguir hablando con ellas y con ellos, se están siguiendo nuestros instrumentos de investigación”, concluyó la presidenta.
Con este nuevo enfoque, la mandataria reafirma su compromiso con la justicia, la transparencia y la búsqueda incansable de los jóvenes desaparecidos. La «nueva visión» de la investigación se presenta como un intento de restablecer la confianza en las autoridades y de corregir las omisiones de gobiernos pasados en el tratamiento de este trágico caso.