Por Juan Pablo Ojeda
Este 14 de febrero, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, dejó en claro que cualquier miembro de la Administración de Control de Drogas (DEA) u otra agencia estadounidense que busque ingresar al país deberá contar con un permiso especial, tal como se estableció en la administración pasada. La mandataria abordó este tema en su conferencia de prensa matutina, a raíz de las constantes preocupaciones sobre la intervención de Estados Unidos en territorio mexicano.
Sheinbaum fue cuestionada sobre las «supuestas infiltraciones» de agentes estadounidenses y los sobrevuelos de aeronaves de EE.UU. en el norte del país. La presidenta fue tajante al descartar que agentes de agencias extranjeras puedan operar en México sin antes cumplir con el protocolo establecido. «Cualquier agente de alguna agencia estadounidense que esté en México tiene que tener un permiso. Desde la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador se estableció un comité interinstitucional que otorga esos permisos, el cual está a cargo de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE)», explicó Sheinbaum.
En cuanto a los sobrevuelos de aeronaves estadounidenses, Sheinbaum reiteró que estos han tenido lugar en el espacio aéreo internacional o dentro del territorio de EE.UU., no sobre territorio mexicano. La presidenta subrayó que, bajo la política del gobierno de México, se coordina con Estados Unidos en cuestiones de seguridad, especialmente en la lucha contra la delincuencia organizada.
México y Estados Unidos, al ser países vecinos, comparten información de inteligencia relacionada con actividades delictivas. Sheinbaum dejó en claro que cualquier dato relevante que tenga EE.UU. sobre México debe ser compartido, ya que la cooperación entre ambos países en temas de seguridad es fundamental para la estabilidad de la región.
El mensaje de la presidenta resalta la soberanía de México en la toma de decisiones sobre su territorio, mientras que al mismo tiempo, reafirma la disposición de su gobierno a trabajar en conjunto con Estados Unidos para enfrentar los retos comunes en materia de seguridad.