CDMX a 10 de octubre, 2024.- La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, mostró su total apoyo a la senadora Andrea Chávez luego de que ésta denunciara públicamente un caso de acoso en su contra. El incidente, que involucra al caricaturista Antonio Garci Nieto, ha generado una fuerte polémica en las redes sociales y en medios de comunicación, debido a la caricatura que sexualizaba la imagen de la senadora.
Durante su habitual conferencia matutina, conocida como «La Mañanera del Pueblo», Sheinbaum fue cuestionada sobre este hecho, y aprovechó la oportunidad para expresar su solidaridad con la legisladora. “Primero mi solidaridad con Andrea Chávez, la senadora; por supuesto hay libertad de expresión, pero hay una parte de este cartón que es denigrante hacia una mujer”, afirmó la mandataria.
El conflicto comenzó cuando la senadora Andrea Chávez, militante de Morena y representante del estado de Chihuahua, denunció a través de un video en redes sociales que el caricaturista Garci había utilizado su rostro en el cuerpo semidesnudo de otra persona para difundir lo que calificó como «contenido erótico», vulnerando así su intimidad y privacidad. En respuesta, Garci justificó su obra alegando que la imagen tenía un trasfondo político, lo que provocó aún más indignación.
La caricatura fue rápidamente eliminada, pero el daño ya estaba hecho. Ante esto, la presidenta subrayó que si bien la libertad de expresión es fundamental, esta no debe ser utilizada para denigrar a ninguna mujer. “El machismo es un problema que todas las mujeres hemos vivido, incluso las que ocupamos cargos de poder. No se trata de censura, sino de respeto a nuestra condición como mujeres”, enfatizó Sheinbaum.
El caso también ha reavivado el debate sobre la Ley Olimpia, que busca sancionar el uso indebido de imágenes íntimas con el propósito de dañar la reputación de las mujeres. Varios colectivos feministas y usuarios en redes sociales han exigido que se aplique dicha ley en el caso de Andrea Chávez.
Claudia Sheinbaum aprovechó para hacer un llamado a las mujeres que han sido víctimas de acoso, sin importar su ideología política, a alzar la voz y denunciar este tipo de actos. “No es solo cuestión de que no estemos de acuerdo en posiciones políticas, es sobre cómo se nos trata por ser mujeres. Este es un llamado para que se eleve el nivel de debate y que no caigamos en estas acciones que denigran a todas nosotras”, concluyó.
El incidente ha despertado nuevamente la conversación sobre la representación de las mujeres en el ámbito público y cómo la violencia de género, en sus diferentes formas, sigue siendo un desafío incluso para las figuras políticas de alto perfil.