Tras el regreso individualizado a la Ciudad Deportiva de Valdebebas, el Real Madrid recibe un impulso significativo con la incorporación al entrenamiento grupal de Eduardo Camavinga, Fede Valverde y Jude Bellingham. Este viernes, bajo la dirección de Carlo Ancelotti, el equipo realizó su primera sesión de la semana a máximo rendimiento, completando el conjunto que el técnico italiano tanto deseaba tras un parón de selecciones que había mermado su plantilla.
El paréntesis internacional, aunque tensionante por los compromisos de sus jugadores, no trajo malas noticias en cuanto a lesiones. Camavinga, quien preocupó al retirarse en un partido con Francia, solo sufrió un esguince «muy leve» en el tobillo izquierdo, del cual ya se ha recuperado. Así, con estos tres jugadores en plena forma, Ancelotti pudo enfocarse en una sesión intensa que inició con trabajo en gimnasio y prosiguió en el campo con ejercicios tácticos y partidillos, antes de cerrar con prácticas de tiros a portería.
Sin embargo, no todo son buenas noticias para el Real Madrid. Thibaut Courtois y David Alaba se vieron obligados a omitir la sesión por lesiones en la rodilla, mientras que Éder Militao busca reintegrarse a las convocatorias tras una larga ausencia. La decisión sobre la participación del defensa brasileño, ausente por una rotura de ligamento cruzado, se tomará un día antes del crucial encuentro contra el Athletic Club en el Santiago Bernabéu.
Este retorno de jugadores clave viene en un momento crucial para Ancelotti, quien busca consolidar su estrategia frente al Athletic Club, especialmente tras la recuperación de Militao. La presencia del brasileño, aún en el aire, marcaría un hito en su carrera, enfrentándose al mismo equipo contra el cual se lesionó al inicio de la temporada. Este partido no solo representa un desafío deportivo sino también un momento emotivo para Militao, potencialmente marcando su regreso 232 días después de su lesión.