CDMX a 19 de septiembre, 2024.- La Cámara de Diputados aprobó, con una mayoría calificada de 483 votos, importantes reformas al artículo 2° de la Constitución, reconociendo los derechos de los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas. Estas modificaciones buscan garantizar la plena participación y el respeto de sus derechos humanos, incluyendo su personalidad jurídica, patrimonio propio, y el reconocimiento de su papel en la construcción del modelo educativo del país.
El dictamen, que fue remitido al Senado para su revisión constitucional, también fortalece el acceso a la salud, promoviendo el uso de la medicina tradicional y la partería para la atención de las mujeres durante el embarazo, parto y puerperio. Las personas indígenas y afromexicanas tendrán derecho a recibir asistencia y asesoría de intérpretes y defensores especializados en sus lenguas y costumbres, garantizando su protección dentro del marco legal mexicano.
Uno de los puntos clave de la reforma es el reconocimiento de los derechos de las mujeres indígenas y afromexicanas, quienes ahora tendrán una mayor participación en los procesos de toma de decisiones dentro de sus comunidades. Esto incluye el acceso igualitario a la educación, salud, y la posesión de tierras, fortaleciendo su papel en el desarrollo integral de sus pueblos.
Además, se garantiza que la niñez, adolescencia y juventud indígenas y afromexicanas reciban atención en sus lenguas, facilitando el acceso a derechos fundamentales como la educación, la cultura, la tecnología y el deporte.
Durante la discusión del dictamen, diversas propuestas fueron presentadas por diputadas y diputados de Morena, PAN, PT, PRI y MC, aunque la mayoría fueron retiradas o desechadas. Finalmente, la reforma fue aprobada por una mayoría calificada, mostrando un consenso entre las diferentes fuerzas políticas sobre la importancia de esta medida.
Esta reforma deriva de una iniciativa presentada por el Ejecutivo Federal en febrero de este año, complementada por propuestas de legisladores en la pasada Legislatura. Ahora, queda en manos del Senado dar el siguiente paso para que estas modificaciones sean una realidad constitucional.