Ciudad de México, 28 de noviembre del 2023 – En un giro histórico, la Comisión de Gobernación de la Cámara de Diputados ha aprobado la extinción de Notimex, la Agencia de Noticias del Estado Mexicano. El dictamen, que ahora pasará al pleno de la Cámara para su votación final, marca el posible fin de una institución que ha sido parte del paisaje mediático mexicano desde 1968.
La propuesta de extinción fue iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien argumentó que Notimex había quedado desfasada frente a los medios digitales y la circulación masiva de información actual. Esta decisión se tomó a pesar de las críticas y la oposición de varios sectores que consideraron insuficiente la justificación del ejecutivo y señalaron la falta de esfuerzos para resolver la huelga que ha afectado a la agencia desde 2020.
El dictamen se aprobó con 22 votos a favor, 17 en contra y 0 abstenciones. Notimex, que había entrado en huelga tras el despido de 245 empleados, ha estado en el centro de la controversia por la gestión de su directora, Sanjuana Martínez. El Sindicato Único de Trabajadores de Notimex ha mantenido sus reclamos, no solo por despidos, sino también por falta de pagos y diálogo.
Además, la situación se agravó con la revelación de conversaciones en las que Sanjuana Martínez presuntamente indicaba cómo utilizar los recursos de la agencia para lanzar ataques mediáticos contra ciertas personas.
En cuanto al proceso de liquidación, se ha designado al Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (INDEP) para gestionar la disolución de Notimex, asegurando la protección de los bienes públicos y respetando los derechos de los más de 200 trabajadores. La Secretaría de Gobernación (Segob) y la Secretaría del Trabajo (STPS) serán las encargadas de gestionar las indemnizaciones, tanto individuales como colectivas, de los trabajadores afectados.
Esta decisión representa un momento crucial en la historia de los medios estatales en México, cerrando un capítulo de más de medio siglo de la agencia Notimex. La extinción de la agencia, en medio de controversias y desafíos económicos, plantea preguntas significativas sobre el futuro del periodismo estatal y la adaptación de los medios de comunicación en la era digital.