Por Bruno Cortés
Calendario Legislativo Definido: 26 Sesiones para la LXVI Legislatura
En un paso crucial para la administración y organización del trabajo legislativo, la Cámara de Diputados de México aprobó, mediante una votación económica, el calendario legislativo para el segundo periodo de sesiones ordinarias de la LXVI Legislatura. Este calendario contempla un total de 26 sesiones ordinarias y una sesión de Congreso General, distribuidas estratégicamente a lo largo de los meses de febrero, marzo y abril del 2025.
El acuerdo, alineado con lo establecido en el artículo 66 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, asegura que cada periodo de sesiones ordinarias tendrá la duración necesaria para abordar todos los asuntos pertinentes, con un límite máximo hasta el 30 de abril. Este marco temporal proporciona a los legisladores un esquema claro para abordar la agenda legislativa de manera eficiente.
El mes de febrero inicia con una sesión de Congreso General el día 1, seguida de sesiones ordinarias los días 5, 11, 12, 18, 19, 25 y 26. Marzo seguirá con sesiones programadas para los días 4, 5, 11, 12, 19, 20, 25 y 26, asegurando una continuidad en el trabajo parlamentario. En abril, se han previsto sesiones para los días 1, 2, 8, 9, 10, 22, 23, 24, 29 y 30, con la posibilidad de clausura del periodo el último día.
Se ha considerado también el bienestar de los legisladores y el personal de la cámara, estableciendo dos días de descanso obligatorio: el 3 de febrero, en conmemoración del 5 de febrero, y el 17 de marzo, en honor al 21 de marzo, conforme al artículo 74 de la Ley Federal del Trabajo. Estos días permiten un breve respiro en la intensa agenda legislativa, promoviendo así el bienestar físico y mental de quienes trabajan en la cámara.
El acuerdo también permite una flexibilidad necesaria en caso de que los trabajos legislativos requieran de sesiones adicionales o en días no calendarizados inicialmente. La Presidencia de la Mesa Directiva tiene la facultad de convocar a sesiones extraordinarias a solicitud de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), asegurando que la cámara pueda responder de manera ágil a las necesidades emergentes o a la agenda parlamentaria.
Este calendario legislativo no solo refleja una planificación meticulosa para el manejo de los asuntos legislativos sino que también demuestra un compromiso con la eficiencia y la transparencia en los procesos democráticos del país. La aprobación de este calendario es una señal positiva de la capacidad del Congreso para organizar y llevar a cabo sus funciones esenciales en beneficio del pueblo mexicano.
La LXVI Legislatura, con este calendario en mano, está lista para abordar los desafíos legislativos que se presenten, asegurando que cada sesión sea una oportunidad para avanzar en la creación y reforma de leyes que impulsen el desarrollo y el bienestar de México.