CDMX a 22 de mayo, 2024.- La controversia respecto a la estrategia de seguridad implementada durante la administración de Felipe Calderón vuelve a encenderse. Esta vez, el expresidente afirma que la violencia en México no fue generada por su polémica táctica contra el narcotráfico, sino por la inacción del gobierno para combatir el crimen.
En una declaración reciente, Calderón respaldó la propuesta de seguridad de la candidata presidencial Xóchitl Gálvez, subrayando que la elección del 2 de junio será crucial para definir el rumbo en materia de seguridad nacional. Afirmó que se debe elegir entre continuar con lo que él denomina «abrazos a los delincuentes» o enfrentar decididamente a la delincuencia y hacer cumplir la ley.
El expresidente argumenta que la inseguridad surge cuando el gobierno no confronta a los grupos criminales, dejando a las familias a merced de estos. Asegura que la violencia estalla cuando los grupos delictivos se disputan el control territorial, causando estragos en la población.
Además, Calderón acusó al gobierno actual, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, de ser el «más sangriento de la historia», atribuyendo esta situación a supuestos vínculos entre el partido Morena y el crimen organizado. Según sus declaraciones, la falta de acción contra la delincuencia estaría relacionada con presuntos financiamientos ilícitos recibidos durante las campañas electorales.
Estas declaraciones reavivan el debate en torno a la estrategia de seguridad en México y plantean interrogantes sobre la efectividad de las políticas gubernamentales para hacer frente al crimen organizado y garantizar la seguridad de la ciudadanía. Con las elecciones en el horizonte, la postura de los candidatos respecto a este tema adquiere aún más relevancia.