Sinaloa a 16 de diciembre, 2024.- En un operativo que sacudió las entrañas del narcotráfico en México, fuerzas federales capturaron a Hernán Domingo Ojeda López, alias «El Mero Mero», un pez gordo en el tráfico de fentanilo y presunto tío de Ovidio Guzmán. La detención ocurrió en Badiraguato, Sinaloa, cuna de capos y territorio del Cártel de Sinaloa.
«El Mero Mero» no era cualquier narco de barrio. Según las autoridades, este tipo era el cerebro detrás del trasiego de pastillas de fentanilo desde Culiacán hacia los Estados Unidos. Su captura es un golpe directo a las venas del narcotráfico que bombean esta droga mortal al norte.
Cuando lo agarraron, «El Mero Mero» traía más que una pistola para defenderse. Los federales le encontraron 800 mil pesos en efectivo que no pudo explicar y, lo más candente, dos bolsas llenas de pastillas de fentanilo. Este decomiso es solo la punta del iceberg de un negocio que mata a miles en Estados Unidos cada año.
El fentanilo no es un juego de niños. Esta droga sintética es responsable de más de 47,000 muertes anuales en Estados Unidos. «El Mero Mero» era una pieza clave en esta cadena mortal, moviendo la droga desde los laboratorios clandestinos en Sinaloa hasta las calles estadounidenses.
Aunque las autoridades no lo han confirmado oficialmente, los rumores corren como pólvora. Se dice que «El Mero Mero» es tío de Ovidio Guzmán López, alias «El Ratón», lo que lo conectaría directamente con la realeza del narco sinaloense.
Esta captura no es solo un número más en las estadísticas. Representa un golpe al corazón de la operación de fentanilo del Cártel de Sinaloa. Con «El Mero Mero» tras las rejas, las autoridades esperan desarticular una parte significativa de la red que inunda de opioides sintéticos el mercado norteamericano.
La caída de «El Mero Mero» es un recordatorio de que la guerra contra el narcotráfico está lejos de terminar. Mientras exista demanda, habrá quien se arriesgue a suplirla. Por ahora, las autoridades mexicanas pueden celebrar esta victoria, pero la batalla contra el fentanilo y sus traficantes continúa.