Por Juan Pablo Ojeda
Este 14 de febrero, Día de San Valentín, la Ciudad de México se convirtió en el escenario de un emotivo evento para celebrar el amor y la unión de parejas. Decenas de parejas contrajeron matrimonio en una boda colectiva organizada por la Dirección General del Registro Civil de la capital, en la que la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, participó como madrina de los nuevos matrimonios.
La exalcaldesa de Iztapalapa y actual mandataria capitalina había anunciado previamente la celebración de estas bodas colectivas, invitando a las parejas a aprovechar la oportunidad para formalizar su unión ante la ley. En su convocatoria, Brugada destacó la importancia de este evento para consolidar el amor y destacó que, por primera vez, se abriría la puerta a todas las parejas, independientemente de su orientación sexual, para que puedan cumplir su sueño de llegar al altar.
El Complejo Cultural Los Pinos fue el lugar elegido para este significativo evento, en el que las parejas escucharon el emotivo mensaje de la jefa de Gobierno. En su discurso, Clara Brugada hizo un llamado a la inclusión y la diversidad, subrayando que no solo se trataba de una celebración para parejas convencionales, sino también un reconocimiento a las diversas formas de amor y familia. “Hoy tenemos familias que ya no son como antes, hoy tenemos diversidad, distintos tipos de familia”, destacó la mandataria local, quien recordó que la Ciudad de México fue una de las primeras en aprobar los matrimonios igualitarios, garantizando así el derecho de todas las personas a amar y casarse sin importar su orientación sexual.
Tras las emotivas palabras de la jefa de Gobierno, las parejas se declararon legalmente unidas, y fue el momento de cortar el pastel, que fue proporcionado por Brugada, quien mostró su alegría y emoción por formar parte de este importante evento. La ceremonia fue un testimonio de los avances en la inclusión y respeto por los derechos de todas las personas en la capital mexicana.
A pesar de la alegría del día, los índices de matrimonio en la Ciudad de México han mostrado una tendencia a la baja en los últimos años. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2022 se registraron solo 23 mil 454 matrimonios, una cifra significativamente menor en comparación con décadas pasadas. Esto se debe a varios factores, como el cambio en las prioridades personales, dificultades económicas y un aumento de las uniones libres.
Además, la edad promedio para contraer matrimonio ha aumentado considerablemente. Mientras que los hombres se casan a los 35 años en promedio y las mujeres a los 32, muchos jóvenes prefieren esperar a tener estabilidad económica y profesional antes de formalizar una relación.
Por otro lado, las uniones igualitarias siguen en aumento, con la Ciudad de México como pionera en la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo en 2009. Desde entonces, la capital ha sido un referente para la inclusión de parejas del mismo sexo, convirtiéndose en uno de los lugares con mayor número de matrimonios igualitarios en el país.
En resumen, las bodas colectivas del 14 de febrero fueron un recordatorio de que el amor es diverso y debe ser celebrado en todas sus formas, con la capital mexicana como un ejemplo de inclusión y avance en los derechos humanos.