Banxico perfila continuar con los ajustes al alza en su tasa de interés, según las minutas de su más reciente anuncio de política monetaria.
Uno de los integrantes de la Junta de Gobierno planteó que debido a los elevados niveles de inflación, la volatilidad, el deterioro de la actividad económica y el riesgo de la intensificación de la guerra en Ucrania, será necesario continuar incrementando la tasa.
“Se debe llevar a un nivel más restrictivo durante el horizonte en que opera la política monetaria”, pues ello contribuiría a mitigar el deterioro del proceso de formación de precios y frenar los aumentos de las expectativas inflacionarias, permitiendo la convergencia de la inflación a la meta.
Sin embargo, enfatizó que las condiciones globales más adversas, en un entorno de mayor incertidumbre, podrían llevar a la Junta de Gobierno a considerar un cambio en el ritmo de ajuste.
Otro de los miembros opinó que es deseable que el ciclo de alzas termine a finales de 2022 y que se mantenga la postura restrictiva durante 2023 para permitir que la política monetaria opere.
Agregó que habrá que tomar en cuenta que la política restrictiva apenas habría comenzado a incidir sobre crédito, consumo e inversión, y aunado a la caída de precios internacionales de materias primas, se podría anticipar que las presiones inflacionarias comenzarán a disminuir.
Inclusive añadió que para la siguiente decisión de política monetaria, ya se podrían desligar de los que haga la Reserva Federal.
Otro integrante planteó que, ante el panorama inflacionario, en el que no hay condiciones para disminuir el ritmo de los incrementos en la tasa de referencia, “podría debatirse si hay que acelerarlo”.