Por Juan Pablo Ojeda
Bad Bunny, el fenómeno global de la música urbana, ha dejado huella en la historia de la industria del entretenimiento mexicano tras superar todas las expectativas de venta de boletos para sus conciertos en el Estadio GNP Seguros de Ciudad de México. Apenas días después de anunciar su tour por la capital, el artista puertorriqueño rompió el récord de ventas en la plataforma Ticketmaster, batiendo un impresionante récord de demanda.
Desde el anuncio el 12 de mayo, cuando Bad Bunny reveló solo dos fechas en el Estadio GNP Seguros, más de 2.2 millones de personas se volcaron a la plataforma de Ticketmaster México. Esto desató una avalancha de solicitudes que sumó más de 7.5 millones de boletos demandados, es decir, 15 veces más que la oferta inicial disponible. Esta extraordinaria cifra obligó a los organizadores a añadir seis fechas adicionales, sumando un total de ocho presentaciones en la capital.
Una demanda sin precedentes
La compañía Ticketmaster, encargada de la venta de boletos, compartió que, debido a la magnitud de la demanda, Bad Bunny habría necesitado ofrecer al menos 123 fechas en el Estadio GNP Seguros para satisfacer a todos los interesados, una cifra nunca antes vista para un solo artista en este recinto.
“La venta de boletos para sus ocho conciertos en el icónico Estadio GNP Seguros desató una demanda sin precedentes que ha dejado clara la magnitud del fenómeno que representa Bad Bunny en la música mundial”, destacó la plataforma de boletos.
Más de 1.2 millones de fanáticos únicos formaron fila virtual durante el proceso de venta, lo que, según Ticketmaster, hubiera sido una fila física que se extendería desde la Ciudad de México hasta Guadalajara, en el estado de Jalisco. El promedio de compra fue de 3.4 boletos por orden, reflejando el fervor y la lealtad de los seguidores del artista.
Un perfil diverso de asistentes
El perfil de los asistentes también ha sido destacado: un 66% de los compradores fueron mujeres, mientras que el 34% restante está compuesto por hombres, con un 30% de los compradores en el rango de edad de 25 a 34 años, seguido por un 34% entre los 18 y 24 años. Además, el 45% de los compradores provienen de fuera de la Ciudad de México y el Estado de México, lo que subraya el impacto nacional de los conciertos de Bad Bunny y su capacidad de convocar multitudes desde diferentes regiones del país.
Los boletos fueron vendidos exclusivamente en formato digital a través de SafeTix, una tecnología de seguridad implementada por Ticketmaster para evitar la reventa y garantizar la autenticidad de las entradas.
Conclusión
El indiscutible fenómeno que es Bad Bunny sigue creciendo. Su capacidad para llenar estadios y superar cualquier expectativa de demanda deja claro que, en la música, no solo está en la cima, sino que también está marcando un antes y un después en la industria del entretenimiento global.