México a 19 de septrimbre del 20203.-Desde el fatídico 19 de septiembre de 2017, el pueblo de Axochiapan en Morelos quedó marcado como el epicentro de uno de los terremotos más devastadores que ha vivido México en su historia reciente. Ese día, la tierra tembló y se llevó consigo decenas de vidas, causó daños en más de 23 mil edificaciones en el estado y lamentablemente resultó en la muerte de 369 personas en el centro del país.
Hoy, seis años después de ese trágico evento, Axochiapan es un testimonio de la resiliencia y determinación de su comunidad. Las calles principales del pueblo están llenas de movimiento y actividad. Todos parecen tener prisa, ya sea para vender sus productos o para llegar a sus destinos. Aunque las respuestas pueden no siempre ser las más amables, el párroco de la localidad señala que esta actitud habla de la persistencia y la fortaleza que caracteriza a los habitantes de Axochiapan.
Uno de los hitos que destacan en la recuperación de la comunidad es la reconstrucción de su iglesia, un monumento histórico que sufrió graves daños en el sismo. La antigua cúpula destruida fue reemplazada por una cúpula de cobre, que se convierte en una de las únicas dos de su tipo en México. Siendo comparada, en términos de majestuosidad, con la cúpula de la Basílica de Guadalupe en la capital del país.
Actualmente, la iglesia se encuentra en su fase final de restauración, y los habitantes de Axochiapan esperan con ansias que este mismo año puedan volver a escuchar los sermones del padre, como era tradición antes del terremoto. «La gente de Axochiapan quisiera ver sus templos terminados», afirma con esperanza uno de los residentes locales.
La historia de Axochiapan es un testimonio de la capacidad de una comunidad para superar adversidades y reconstruir sus vidas y patrimonio después de una tragedia. Su determinación y resiliencia son un ejemplo para todos los mexicanos que han enfrentado los desafíos sísmicos y naturales que caracterizan a esta región.