CDMX a 9 de mayo, 2024.- El Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) han sellado un acuerdo sin precedentes con miras a modernizar y agilizar el proceso de cómputo judicial de las elecciones presidenciales. Esta alianza histórica tiene como objetivo principal digitalizar los paquetes electorales para determinar el ganador de la contienda del 2 de junio en un tiempo récord.
Anteriormente, el Tribunal Electoral requería un mes entero para digitalizar los 300 paquetes electorales y realizar la suma de votos. Sin embargo, gracias al nuevo convenio, el INE se encargará de esta tarea, entregando al Tribunal la información cargada y digitalizada en una USB. Este cambio representa una significativa reducción en los tiempos de procesamiento y una mayor eficiencia en el sistema electoral.
Según lo estipulado por la ley, el INE está a cargo de realizar los cómputos de todas las elecciones del 2 de junio, exceptuando la Presidencia de la República, competencia exclusiva de la sala superior del TEPJF. Por ello, todos los paquetes electorales de los 300 consejos distritales de México serán enviados al Tribunal para su revisión y validación.
Durante la ceremonia de firma del convenio INE-TEPJF, el magistrado Felipe Fuentes Barrera destacó que la comunicación sobre el proceso electoral se realizará por correo electrónico, agilizando aún más el proceso. Este enfoque innovador busca optimizar la operatividad del cómputo, un proceso colosal y complejo por naturaleza.
En cuanto al cómputo de la jornada electoral, la Sala Superior instalará 12 mesas con cuatro funcionarios cada una. La agilidad será clave, con una persona encargada de recibir el paquete, dos para el escrutinio y otro para la integración, antes de que sea trasladado a una bodega bajo resguardo de la Guardia Nacional y otras autoridades de seguridad.
El magistrado reiteró el compromiso del Tribunal Electoral con la legalidad y la justicia en el proceso electoral, asegurando que están preparados para garantizar unas elecciones transparentes y confiables. Su objetivo es claro: ofrecer a la sociedad elecciones que cumplan con sus expectativas y refuercen la confianza en el sistema democrático.