CDMX a 6 de agosto, 2024.- En un movimiento estratégico para la cultura capitalina, Martí Batres, Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, ha nombrado a Argel Gómez Concheiro como encargado de despacho de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México. Con un amplio historial en gestión cultural y organización de grandes eventos, Gómez Concheiro promete dar continuidad y frescura a la administración cultural de la capital.
Argel Gómez Concheiro es una figura destacada en el ámbito cultural. Maestro en Estudios Latinoamericanos por la UNAM y especialista en Políticas Culturales y Gestión Cultural por la OEI, el entonces Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, y la UAM, Gómez Concheiro ha dedicado su carrera a la promoción cultural, el arte y el diseño gráfico. Actualmente, se encuentra cursando el doctorado en Estudios Latinoamericanos en la UNAM, enfocando sus investigaciones en juventud, movimientos sociales e industrias culturales.
Gómez Concheiro ha liderado numerosos espacios culturales en la Ciudad de México. Fue director de la Central del Pueblo, Centro de Artes Libres en el Centro Histórico, y del Teatro del Pueblo, donde organizó festivales y conciertos. Además, desarrolló el proyecto “La Kachomba”, un teatro móvil itinerante, y coordinó talleres en la Fábrica de Artes y Oficios (FARO) Oriente.
Su contribución no se limita a la gestión cultural, pues también ha participado en más de 15 exposiciones y ha impartido seminarios y conferencias en instituciones como la UNAM, la UAM, y la BUAP. Es autor del libro «La fuerza de la razón. Los estudiantes contra el neoliberalismo. Historia del Consejo Estudiantil Universitario 1986-1992» y ha colaborado en publicaciones como La Jornada y Memoria.
La Secretaría de Cultura de la Ciudad de México tiene la misión de garantizar los derechos culturales de la ciudadanía, promoviendo el desarrollo integral y fortaleciendo la convivencia. Bajo la dirección de Gómez Concheiro, se espera que continúe impulsando políticas que aseguren el acceso equitativo a bienes y servicios culturales, así como la protección de las diversas identidades.