CDMX a 9 de septiembre, 2024.- En medio de la tensa discusión sobre la Reforma Judicial en el Senado, el senador del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya, ha levantado una fuerte acusación contra la mayoría de Morena. El legislador denunció que tres senadores de la oposición están siendo presionados y acosados para votar a favor de la reforma, recibiendo «propuestas corruptas» y siendo hostigados por fiscalías estatales controladas por el oficialismo.
Durante la sesión de las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos, Anaya exigió que se respete la libertad de voto de los legisladores. “Yo no me atrevería a hacer esta denuncia si no tuviera conocimiento con circunstancias de tiempo, modo y lugar de al menos tres senadoras y senadores a quienes se les están haciendo propuestas corruptas y, por otro lado, se les está acosando a través de las fiscalías estatales”, expresó el panista con firmeza.
El senador también aprovechó para subrayar la necesidad de una reforma profunda al sistema de justicia, destacando que la impunidad en México es alarmante, ya que de cada 100 delitos, solo uno recibe castigo. No obstante, criticó que algunos en la oposición hayan caído en lo que considera «una trampa» del gobierno de Andrés Manuel López Obrador al centrar el debate en la participación del pueblo en la elección de jueces, en lugar de abordar temas más estructurales.
Anaya alertó sobre tres aspectos peligrosos ocultos en la reforma judicial. En primer lugar, señaló que el partido en el poder tendrá el control de la preselección de candidatos para el Poder Judicial, lo que anularía la democratización del sistema. Además, advirtió que el exceso de boletas y listas de candidatos podría generar caos entre los votantes. Finalmente, expresó su preocupación sobre el Tribunal de Disciplina Judicial, que según él, podría tener más poder que los propios ministros de la Suprema Corte, alterando el balance de poder en el país.
El debate sobre la Reforma Judicial continúa, y mientras algunos sectores exigen una transformación profunda del sistema de justicia, las denuncias de Anaya suman un nuevo elemento de controversia que podría influir en el voto de los legisladores y en la percepción pública sobre las intenciones del gobierno en torno a la justicia en México.