Por Juan Pablo Ojeda
En una nueva declaración que mezcla su visión sobre la reforma al Poder Judicial y sus críticas a la oposición, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), reafirmó que la reforma que permitirá la elección de jueces y magistrados por voto directo se llevará a cabo en 2025. Durante su conferencia de prensa del 20 de agosto, López Obrador también abordó el tema del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) Ciudadano y sus críticas a la legitimidad de la victoria de Claudia Sheinbaum Pardo en las elecciones presidenciales del 2 de junio.
López Obrador, quien se ha convertido en una figura central en la política nacional a través de su liderazgo en Movimiento Regeneración Nacional (Morena), hizo hincapié en que la elección directa de jueces y magistrados será una parte importante de su legado político. No obstante, también utilizó su intervención para comentar sobre la persistente oposición a su movimiento y las dudas sobre el resultado electoral de Sheinbaum, afirmando que tales cuestionamientos son reflejo de una resistencia al cambio.
“Dicen que no ganó Claudia (Sheinbaum), increíble, ¡increíble!”, exclamó el presidente, con un tono de burla dirigido a las críticas que han surgido respecto al proceso electoral. López Obrador criticó la actitud de los opositores, describiéndola como un intento de desacreditar la victoria de Sheinbaum, y recordó que durante las elecciones del pasado 2 de junio ya se había experimentado un fenómeno similar, cuando se solicitó el recuento de las actas electorales.
El presidente también denunció lo que considera un “clasismo” y “racismo” por parte de quienes se oponen a su administración. Comentó que este sentimiento se evidencia en la revisión de las actas de las zonas más favorecidas en la Ciudad de México, y que tales actitudes reflejan un intento de mantener el status quo de influencia y poder de la oposición.
En la misma conferencia, López Obrador aprovechó para rememorar momentos pasados de resistencia de la oposición, citando el caso de Martí Batres, actual jefe de Gobierno de la Ciudad de México, quien en 2012 no ganó una elección a pesar de su “perfil adecuado” y honestidad. “Era como cuando empezábamos nosotros en Tabasco y yo decía que si ponían de candidata a una vaca, con todo respeto, ganaba la vaca”, bromeó el presidente.
El pasado 17 de agosto, las redes sociales vieron una nueva ronda de conteos de actas por parte del PREP Ciudadano, justo después de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) confirmara a Claudia Sheinbaum como presidenta electa. Aunque algunos resultados preliminares parecían poner a Xochitl Gálvez, excandidata presidencial de la alianza Fuerza y Corazón por México, por encima de Sheinbaum, el INE y el TEPJF han reafirmado que la morenista recibió 35 millones 924 mil 519 votos, equivalente al 59.75% de los sufragios, desestimando cualquier validez del recuento ciudadano adicional.
Esta dinámica revela un continuo enfrentamiento entre el gobierno de AMLO y sus críticos, en el que la política electoral y las reformas judiciales siguen siendo temas centrales y altamente disputados en el escenario político mexicano.