En la conferencia matutina desde Palacio Nacional, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, admitió que uno de los mayores retos de su gobierno ha sido reducir el delito de extorsión, el cual no ha logrado disminuir significativamente a lo largo de su sexenio.
López Obrador destacó que, si bien en la mayoría de los delitos se han registrado descensos notables, como en homicidios, secuestros, y robos de vehículos y combustible, la extorsión sigue representando una preocupación significativa a nivel nacional.
«En casi todos los delitos hemos logrado reducciones importantes. Por ejemplo, el secuestro ha disminuido en un 70%, el robo de vehículos en un 50%, y el robo de combustible, conocido como huachicol, ha caído en un 95%», afirmó el mandatario. «Sin embargo, la extorsión sigue siendo una asignatura pendiente. Es el único delito donde no hemos podido alcanzar una disminución significativa», agregó.
El presidente mencionó que la estrategia de su gobierno ha sido eficaz en otros frentes del crimen organizado y la delincuencia, destacando la notable reducción en pérdidas económicas derivadas del robo de combustible.
«Con la estrategia implementada, hemos logrado un ahorro considerable al evitar el robo de combustibles, calculado en 330 mil millones de pesos», precisó López Obrador.
El presidente también recordó cómo su administración ha enfrentado críticas y desafíos en materia de seguridad desde el inicio de su mandato, pero enfatizó los avances en otros ámbitos delictivos que han beneficiado la estabilidad y seguridad del país.
«En otros delitos graves, como el secuestro, hemos avanzado de manera significativa, evitando situaciones que eran comunes en administraciones anteriores», subrayó López Obrador.
La lucha contra la extorsión, según el presidente, continuará siendo una prioridad en su gobierno, con el objetivo de fortalecer las estrategias de seguridad y cumplir con el compromiso de garantizar la tranquilidad y protección de los ciudadanos mexicanos.