El presidente Andrés Manuel López Obrador abordó finalmente la masacre en una vecindad de León, Guanajuato, ocurrida hace dos días, donde seis personas perdieron la vida. La tragedia ha cobrado relevancia debido a la posible implicación de miembros de la Guardia Nacional en el incidente.
Durante la conferencia de prensa matutina del 11 de junio desde Palacio Nacional, el mandatario expresó su conocimiento sobre el suceso pero instó a esperar los resultados de las investigaciones en curso.
El fatídico evento, que tuvo lugar la noche del domingo 9 de junio, involucró a individuos armados que irrumpieron en un domicilio alrededor de las 21:30 horas, atacando con armas de fuego a cuatro mujeres y dos bebés.
La polémica se intensificó debido a la presunta participación de elementos de la Guardia Nacional, quienes aparentemente habrían estado en el lugar minutos antes del ataque, lo que sugiere una posible conexión con los perpetradores.
Sin embargo, el presidente López Obrador aclaró que la secuencia de los hechos no se dio como se había mencionado inicialmente. Afirmó que antes de realizar más declaraciones, desea revisar cómo se manejó la información.
«Quiero ver si se informó correctamente, no es simplemente decir ‘fue la GN’ de inmediato, o ‘tenemos sospechas sobre la Guardia’ cuando los perpetradores ingresan después. Necesitamos más información», señaló.
Asimismo, aseguró que las autoridades pertinentes ya están llevando a cabo una investigación exhaustiva y subrayó que aquellos responsables serán llevados ante la justicia, incluidos eventuales miembros de la Guardia Nacional si se comprueba su implicación.
«Independientemente de cómo se haya manejado, debemos asegurarnos de hacer justicia. Debemos identificar y castigar a los responsables. Si hay implicación de la Guardia Nacional, también enfrentarán las consecuencias», concluyó.