CDMX a 27 de septiembre 2024.- A diez años de la trágica desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, los familiares de los jóvenes siguen exigiendo respuestas. En una marcha llena de dolor y reclamos, los padres y madres de los desaparecidos señalaron al presidente Andrés Manuel López Obrador de haberles traicionado al no cumplir su promesa de esclarecer el caso y proteger al Ejército, a quien señalan como responsable en la desaparición.
Durante una manifestación que partió del Ángel de la Independencia y que buscaba llegar al Zócalo capitalino, los padres de los 43 denunciaron la colocación de vallas metálicas que les impidió acceder a la plaza principal del país, reclamando al presidente por no cumplir con su compromiso de justicia. Hilda Legideño, madre de uno de los estudiantes, declaró frente a Palacio Nacional: «AMLO nos dio la espalda y protegió al Ejército».
Maximiliano Hernández, padre de otro de los normalistas, señaló que el presidente interrumpió las investigaciones en 2022, cuando las pesquisas apuntaban a la participación del Ejército en los hechos. «El que encubre o entorpece es cómplice de la desaparición forzada», afirmó con indignación.
La manifestación, que conmemoró el décimo aniversario de la desaparición de los estudiantes, no estuvo exenta de tensiones. Grupos de encapuchados aprovecharon la marcha para realizar actos vandálicos, lo que llevó a empresarios de la zona de Paseo de la Reforma y el Centro Histórico a cerrar sus negocios y colocar protecciones en ventanas y accesos. A pesar de las medidas de seguridad, varios bancos, tiendas y cafeterías sufrieron daños, con vidrios rotos y saqueos.
Claudia Sheinbaum, presidenta electa que tomará posesión el próximo 1 de octubre, ha asegurado que continuará con las investigaciones para llegar a la verdad sobre el caso Ayotzinapa, un compromiso que los familiares esperan se cumpla tras la decepción que dicen haber vivido con López Obrador.
En su conferencia matutina del 26 de septiembre, el presidente López Obrador justificó la colocación de vallas metálicas alrededor de Palacio Nacional, mencionando que la medida era necesaria para evitar la presencia de provocadores. Sin embargo, este blindaje fue visto por las familias como un símbolo de la distancia que ha marcado el gobierno hacia su lucha.
«Nosotros también somos pueblo», gritaban los manifestantes al acercarse a las vallas que bloqueaban su paso, evidenciando la frustración de quienes durante una década han buscado la verdad sobre lo que ocurrió aquella Noche de Iguala.
El caso Ayotzinapa ha dejado una marca profunda en la sociedad mexicana, y sigue siendo un tema pendiente para los gobiernos de Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador. Las investigaciones han señalado posibles responsabilidades de las fuerzas armadas, pero la justicia completa aún parece lejana.