AMLO niega injerencia en asuntos internos del Perú: ‘No, estamos opinando’
Editor web Maya Comunicación 
CDMX a 10 de diciembre, 2022.- El presidente Andrés Manuel López Obrador negó que México esté interviniendo en la crisis política del Perú, esto luego de que el Ministerio de Relaciones Exteriores peruano señaló a las autoridades mexicanas de injerencista en los asuntos internos de su país. Aseguró que el Gobierno Federal solo ha opinado sobre el conflicto y son ellos quienes tendrán que resolver sus asuntos.
A pregunta expresa sobre si México está interviniendo en el asunto interno de Perú, tras la destitución y aprehensión de Pedro Castillo, por el intento de golpe de Estado, AMLO respondió: “No, estamos opinando. Allá lo van a resolver ellos, pero sí es violatorio lo que se están haciendo, a la democracia, si lo eligió el pueblo, por qué lo van a quitar”.
En un primer momento se negó a responder sobre la postura de Perú, que a través de un comunicado manifestaron su rechazo a la “injerencia” tanto del presidente López Obrador como del canciller Marcelo Ebrard ante la justificación hacia Pedro Castillo para intentar disolver al Congreso de la República.
“No tengo opinión sobre eso, ojalá y resuelvan sus asuntos, porque se tiene que respetar la voluntad del pueblo”, expresó AMLO a la llegada a la presa el Cuchillo en Nuevo León.
Sin embargo mantuvo su postura, en defensa de Pedro Castillo, “no es posible que los de arriba no escuchen el mandato popular, entonces para qué es la democracia… el pueblo el soberano”.
Justificó que a Pedro Castillo “empezaron a hostigarlo para querer destituirlo hasta que lo lograron, él emite un decreto en una situación desesperada y utilizaron esa situación para destituirlo con un precepto de ‘incapacidad moral’, lo cierto es que son intereses creados”.
El Gobierno de México ha manifestado la voluntad del país de otorgarle asilo al expresidente Pedro Castillo por tradición, como ya ocurrió en un hecho similar con Evo Morales en 2019. Además el presidente López Obrador ha mostrado renuencia en reconocer a Dina Boluarte, como la nueva presidenta de Perú, debido a que no le gusta el “seguidismo” de países que sí lo han hecho, como Estados Unidos.
