CDMX a 16 de febrero del 2022.-Las confrontaciones entre el mandatario mexicano y el gremio periodístico continúan en medio de un clima tenso en el que ya han sido asesinados seis comunicadores en lo que va de 2021 en el país latinoamericano.
Sin embargo, López Obrador considera que no todos los reporteros viven en la vulnerabilidad, ya que existe un grupo minúsculo de informadores que, según él, sirven a las élites políticas y empresariales que están en contra de su Gobierno. Por esa razón, aseguró que periodistas como Carmen Aristegui, Carlos Loret de Mola y Joaquín López-Dóriga tienen el deber ético de hacer públicos sus ingresos.
«Sin necesidad de que intervenga transparencia, el INAI, por ética, ellos deberían informar cuánto ganan: Loret, López-Dóriga, Ciro Gómez-Leyva, Carmen Aristegui… [Que revelen] cuánto ganan, a lo mejor lo de sus bienes no, aunque ayudaría mucho saber», propuso el presidente mexicano durante su conferencia matutina del 16 de febrero.
También sugirió que Jorge Ramos, periodista de la cadena estadounidense Univisión y crítico de la Cuarta Transformación, siga el camino de sus colegas al informar públicamente cuánto gana.
López Obrador sostiene que esta cámara de «periodistas famosos» representan intereses ajenos al pueblo.
Además, afirmó que el ejercicio periodístico de estas personas está basado en calumnias y falsedades que, dijo, sólo benefician a la que él llama «la mafia del poder», el mismo grupo de políticos de periodistas, empresarios y políticos que evitó que llegara a la Presidencia de la República en dos elecciones federales, comentó.
«¿Por qué nada más van a informar los servidores públicos [sobre sus ingresos]? Dicen que ellos [los periodistas] son privados. No. Sus ingresos tienen que ver con el presupuesto y los bienes públicos»; agregó el jefe de Estado.
Desde la semana pasada, López Obrador mantiene una confrontación abierta contra Carlos Loret de Mola, comunicador de Latinus que ha encabezado algunos reportajes que señalan directamente a la familia del presidente mexicano de beneficiarse con recursos públicos.
En la más reciente investigación periodística de Latinus y la organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), se asegura que José Ramón López Beltrán, el hijo mayor del mandatario, vivió en una lujosa mansión de Texas que antes perteneció a Keith L. Schilling, un alto directivo de Baker Hughes, compañía que tiene contratos vigentes con Pemex.
Desde la publicación de ese reportaje, distintos sectores de los medios de comunicación, la política y la sociedad civil especulan sobre un posible conflicto de interés entre la familia de López Obrador, el Gobierno mexicano y Baker Hughes.
En respuesta, el 11 de febrero, el presidente de México dio a conocer que el comunicador de Latinus ganó alrededor de 35.200.000 pesos en 2021, según documentos que presuntamente tiene en su poder y que le hicieron llegar a su oficina de Palacio Nacional.
Además, envió una carta al Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) para pedir que se esclarezcan los ingresos de Carlos Loret de Mola, así como de sus socios y familiares.
Tomado de Sputnik.