Durante la conferencia matutina del 7 de junio, el presidente Andrés Manuel López Obrador reveló que ha instado a sus hijos José Ramón, Andrés Manuel y Gonzalo Alfonso López Beltrán, a esclarecer todas las acusaciones en su contra, especialmente si planean asumir cargos públicos en el próximo sexenio, encabezado por Claudia Sheinbaum.
López Obrador expresó su preocupación por las calumnias y señalamientos que sus hijos han enfrentado, particularmente los dos mayores, y les aconsejó redactar un documento detallando sus acciones y desmintiendo cada acusación. Aunque no especificó cuándo se publicaría dicho documento, enfatizó la importancia de no dejar ningún caso pendiente.
Si bien el presidente había acordado previamente con su familia que ninguno de ellos ocuparía cargos públicos durante su mandato, insinuó una posible participación de sus hijos en el próximo gobierno. Sin embargo, subrayó que no los representarán y reiteró su decisión de retirarse de la política al concluir su mandato, excepto en el caso de un eventual llamado de Sheinbaum.
«Ellos son libres de seguir participando si así lo deciden, pero no me representarán porque ya he concluido. Solo atendería un llamado de mi presidenta, ejerciendo mi derecho a disentir», concluyó.
Esta declaración surge en un contexto en el que López Obrador enfrenta acusaciones y críticas hacia su administración, y busca asegurar la reputación y el camino político de sus hijos en caso de que decidan seguir su legado en la esfera pública.