Por Juan Pablo Ojeda
El presidente Andrés Manuel López Obrador develó su retrato en óleo en la Galería de los Presidentes de Palacio Nacional, un acto que marca el cierre de su sexenio y precede la entrega del gobierno a su sucesora, Claudia Sheinbaum Pardo. La obra fue realizada por el pintor yucateco Ermilo Espinosa, quien expresó su satisfacción al haber recibido “absoluta libertad creativa” para capturar la esencia del mandatario.
El retrato, que fue develado poco después de la última conferencia mañanera de AMLO, incorpora elementos simbólicos significativos que reflejan su administración. Espinosa destacó que el bastón de mando es el eje central de la pintura, simbolizando la comunicación y el trato directo que el presidente ha mantenido con la ciudadanía. Además, se incluye la representación de la gente en el Zócalo, un elemento fundamental que caracteriza la cercanía de AMLO con el pueblo.
“Quería que no solo se captara su rostro, sino también su expresión y la investidura presidencial. Este retrato refleja no solo a la persona, sino a su relación con la sociedad”, declaró el pintor. La obra retrata a López Obrador con una expresión “amable, pero firme”, parado en el balcón presidencial, con la ventana abierta, simbolizando su apertura hacia la ciudadanía.
Espinosa subrayó que esta es la primera obra en la que se representa al pueblo en el retrato presidencial, rompiendo la barrera tradicional entre el mandatario y la sociedad. “Creo que esto refleja un cambio en la forma de ver la presidencia en México”, concluyó.
Este evento no solo resalta la culminación de un sexenio, sino que también refleja una filosofía de gobierno basada en la cercanía y la comunicación directa con los ciudadanos, una característica que ha definido la administración de AMLO.