Durante la conferencia matutina celebrada en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador emitió críticas hacia la gestión pasada de la Secretaría de Salud, señalando que esta institución fue reducida a un simple intermediario financiero bajo los gobiernos neoliberales.
López Obrador destacó que la Secretaría de Salud se limitaba principalmente a transferir los fondos federales a los gobiernos estatales, describiéndola como un «cascarón» con un rol administrativo limitado. Explicó que, en su opinión, la dependencia estaba mayormente centrada en la gestión financiera y solo supervisaba un pequeño número de institutos y hospitales.
El presidente expresó su preocupación por el uso ineficiente de los recursos asignados al sector salud durante ese período, señalando que, en algunos casos, los fondos destinados al Seguro Popular y otros programas eran desviados para otros propósitos. Esto, según López Obrador, resultaba en una falta de inversión en infraestructura y servicios médicos esenciales, afectando la calidad y accesibilidad de la atención sanitaria en diversas regiones del país.
Finalmente, reiteró su compromiso de entregar un sistema de salud de calidad para septiembre, resaltando la importancia de garantizar el derecho a la salud establecido en la Constitución mexicana.