La diputada de Morena, Reyna Celeste Ascencio Ortega, ha presentado una iniciativa que busca sancionar a los moderadores que no sean “imparciales” en los debates electorales. La propuesta tiene como objetivo garantizar que los moderadores sean imparciales ante los candidatos que participan en los debates, para evitar que la parcialidad de los moderadores trastoque la legitimidad del debate político.
La legisladora argumentó que si un moderador se muestra “ríspido, irreverente, agresivo y descortés” con uno o varios candidatos, pero no tiene la misma actitud hacia otros contendientes, entonces no está siendo un moderador imparcial. Según Ascencio Ortega, esto pone al moderador por encima de los candidatos que debaten y trastoca gravemente la legitimidad del debate político.
La diputada morenista citó el ejemplo del primer debate entre las candidatas a la gubernatura del Estado de México, Delfina Gómez y Alejandra del Moral. En este caso, según Ascencio Ortega, la moderadora, Ana Paula Ordorica, adoptó una posición parcial evidente en favor de una de las participantes. Esto puso en tela de juicio la legitimidad de la organización de estos eventos, según la legisladora.
La iniciativa propuesta por Ascencio Ortega busca reformar el artículo 218 de la Ley de Instituciones y Procedimientos Electorales. La propuesta contempla sancionar a los moderadores que muestren actitudes parciales hacia un candidato o candidata con una multa de hasta 51 mil 870 pesos.
Esta iniciativa ha generado opiniones encontradas. Por un lado, algunos consideran que es necesario garantizar la imparcialidad de los moderadores para que los debates electorales sean justos y legítimos. Sin embargo, otros argumentan que la iniciativa podría limitar la libertad de expresión de los moderadores y que podría ser utilizada de manera indebida para censurar a aquellos que critiquen a ciertos candidatos o partidos políticos.
En cualquier caso, es importante destacar la importancia de los debates electorales en el proceso democrático y la necesidad de garantizar que sean justos, imparciales y legítimos. Los moderadores tienen una responsabilidad clave en la organización de estos eventos y deben desempeñar su papel con la mayor objetividad y profesionalismo posible.