Por Juan Pablo Ojeda
En un revelador reportaje publicado este martes por el diario El Universal, se ha documentado que el exgobernador de Chihuahua, Javier Corral, posee una extensa riqueza inmobiliaria que incluye 14 propiedades en varias localidades de México, valoradas en conjunto en 73.6 millones de pesos. Las propiedades fueron adquiridas a lo largo de casi dos décadas y abarcan los estados de Chihuahua, Sinaloa, y la Ciudad de México.
El reportaje se basa en exhaustivas revisiones al Registro Público de la Propiedad, donde se identificaron propiedades que no fueron incluidas en su última declaración patrimonial como gobernador, en la que solo reportó 13 propiedades con un valor total de 19 millones de pesos. Además, algunas de las propiedades documentadas fueron adquiridas a precios significativamente inferiores a su valor comercial. Por ejemplo, un terreno de 227 metros cuadrados en Chihuahua, con un valor de mercado de 780 mil pesos, fue adquirido en 2018 por solo 200 mil pesos.
Entre las propiedades destacadas, se encuentran un terreno de 150 hectáreas en el Ejido Nombre de Dios, adquirido en 2009 por 4 millones de pesos, y una cabaña en Basaseachic comprada en 2002 por 450 mil pesos. Este terreno y la cabaña no fueron reportados en su declaración de 2016.
El reportaje también destaca la compra de inmuebles en la capital de Chihuahua, incluyendo una propiedad de 448 metros cuadrados en Fuentes de Andalucía adquirida en 2004 y valorada actualmente en 5 millones 620 mil pesos. Además, en 2006 Corral adquirió un inmueble en el fraccionamiento Campanario, con un valor de más de 11 millones de pesos en la actualidad.
En la Ciudad de México, Corral posee dos departamentos en la Colonia Juárez, mientras que en Mazatlán tiene otro inmueble. También se ha documentado un local comercial y varias casas adicionales, con la mayoría de sus propiedades ubicadas en Chihuahua.
Estas revelaciones surgen en un contexto de acusaciones de corrupción contra Corral, quien enfrenta una denuncia por corrupción y defraudación fiscal relacionada con uno de estos terrenos. La discrepancia entre su declaración patrimonial y la realidad de su riqueza inmobiliaria plantea serias dudas sobre la transparencia y legalidad de sus adquisiciones.