Editor web Maya Comunicación 
Si estás buscando un destino que combine historia, naturaleza y una pizca de aventura, Aculco es el lugar perfecto para ti. Este encantador Pueblo Mágico, ubicado a solo una hora de la Ciudad de México, te espera con sus calles empedradas, cascadas impresionantes y una rica herencia cultural. ¡Prepárate para un viaje que no olvidarás!
Aculco: Donde el Agua Tuerce
Con un nombre que proviene del náhuatl y significa «Donde el Agua Tuerce», Aculco es un lugar que promete sorpresas a cada paso. Este municipio, enclavado entre montañas y peñascos a 2,400 metros sobre el nivel del mar, ofrece un clima fresco y agradable que invita a explorar sus rincones.
Un Paseo por la Historia
Aculco no solo es hermoso, sino que también está lleno de historia. Originalmente habitado por los otomíes y posteriormente dominado por los aztecas, este lugar ha sido testigo de importantes eventos históricos. Desde su fundación como San Jerónimo Aculco en la época colonial hasta su relevancia en la Guerra de Independencia, cada piedra de sus calles empedradas cuenta una historia.
Arquitectura que Enamora
El corazón de Aculco es su Plaza Principal, rodeada de edificios revestidos con piedra de cantera, símbolo del trabajo e identidad de sus habitantes. No puedes dejar de visitar la Parroquia y ex convento de San Jerónimo, que alberga obras de arte virreinal, incluyendo «La última cena» del pintor Miguel Cabrera. Un verdadero viaje al pasado.
Naturaleza en su Máxima Expresión
Si eres amante de la naturaleza, Aculco te dejará sin aliento. Aquí, las cascadas de La Concepción y Tixhiñu son paradas obligadas. La Concepción, con una caída de más de 25 metros, es ideal para practicar rappel y campismo. Tixhiñu, aunque menos conocida, ofrece un entorno perfecto para el senderismo y la exploración al aire libre.
Delicias para el Paladar
No puedes visitar Aculco sin probar sus famosos quesos artesanales. Los talleres locales ofrecen recorridos gastronómicos donde podrás degustar estos productos frescos y deliciosos. Además, la producción de piedra de cantera, utilizada en la arquitectura local, es otra muestra del talento y dedicación de los aculquenses.
Más Allá del Turismo
Además de sus atractivos naturales e históricos, Aculco tiene sitios que enriquecen su oferta turística. El Santuario del Señor de Nenthé, la Casa Hidalgo, y la Hacienda La Cofradía son paradas que te permitirán entender mejor la cultura y la historia de este Pueblo Mágico.
Aventuras para Toda la Familia
Desde el Balneario Municipal, ideal para disfrutar en familia, hasta la Peña y Presa de Ñadó, perfecta para la pesca deportiva y paseos a caballo, Aculco ofrece actividades para todos los gustos. No importa si buscas tranquilidad o aventura, aquí encontrarás lo que necesitas.
Aculco es más que un destino; es una experiencia que combina lo mejor de la historia, la naturaleza y la cultura mexicana. Así que, ¿qué esperas? Prepara tus maletas y ven a descubrir este tesoro escondido del Estado de México. ¡Te aseguro que te irás con ganas de volver!
