La temporada 2025 de Fórmula 1 arrancó con intensidad en el Gran Premio de Australia, donde el piloto novato Ollie Bearman protagonizó el primer incidente significativo durante la primera sesión de prácticas libres. El británico de Haas perdió el control de su monoplaza antes de la curva 10 en el circuito de Albert Park, lo que resultó en una colisión contra las barreras y la consecuente bandera roja que interrumpió la sesión.
El accidente ocurrió cuando Bearman salió de la trampa de grava y no pudo recuperar el control del vehículo, impactando con fuerza contra el muro. El choque causó daños significativos en el Haas, incluyendo la pérdida de una rueda trasera y la destrucción de la suspensión delantera derecha. Afortunadamente, Bearman salió ileso y confirmó por radio que se encontraba bien.
Este incidente subraya los desafíos que enfrentan los pilotos novatos al adaptarse a la exigente competición de la Fórmula 1. Los mecánicos de Haas ahora tienen la tarea de reparar el monoplaza para las siguientes sesiones.
A pesar de la interrupción, la sesión se reanudó tras una pausa de 10 minutos. Lando Norris, de McLaren, registró el mejor tiempo con una vuelta de 1:17.252. Carlos Sainz, en su debut con Williams, sorprendió al marcar el segundo mejor tiempo, a solo 0.149 segundos de Norris. Charles Leclerc, de Ferrari, completó el top tres.
La temporada 2025 promete emociones fuertes, y el Gran Premio de Australia ya ha dejado claro que cada sesión puede traer sorpresas y desafíos para los equipos y pilotos.