Los estragos no se limitan a lo material, ya que Otis ha dejado a su paso unas 250,000 familias damnificadas, con un saldo trágico de al menos 48 muertos y 26 desaparecidos. La urgencia de la situación ha llevado a la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, a advertir que la reactivación del turismo será un proceso que llevará tiempo. Se requieren reparaciones estructurales y apoyos sociales significativos para revitalizar la zona.
La población de Acapulco, consciente de la importancia del turismo en su vida cotidiana, está respondiendo con resiliencia y determinación. Los esfuerzos de desescombro se multiplican para restaurar la infraestructura turística y generar confianza en visitantes potenciales.
En medio de este panorama desafiante, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha comprometido su apoyo a los empresarios del sector turístico de Acapulco. Su promesa de respaldo busca impulsar la reactivación económica, subrayando la importancia estratégica de la recuperación del turismo para el bienestar de la comunidad.
En resumen, Acapulco se encuentra en medio de una compleja realidad, donde los estragos del huracán Otis han afectado significativamente la vitalidad económica de la ciudad. Sin embargo, la resiliencia de la población y el compromiso gubernamental ofrecen un rayo de esperanza para la recuperación progresiva de la actividad turística, vital para el renacer de esta icónica localidad mexicana.