¿A qué edad debo dejar de tomar café? La ciencia lo explica
Editor web Maya Comunicación 
El café es una de las bebidas más populares del mundo, apreciada por su aroma, sabor y la energía que proporciona. Contiene una variedad de compuestos esenciales como antioxidantes, ácidos orgánicos, vitaminas, minerales y bioactivos que pueden ofrecer beneficios para la salud. Estos componentes son responsables de mejorar el rendimiento, contribuir a la salud del hígado y elevar el estado de ánimo, haciendo del café una elección favorita para millones de personas diariamente.
Los beneficios del café
El consumo moderado de café se asocia con múltiples beneficios para la salud. Los antioxidantes presentes en el café ayudan a combatir el daño de los radicales libres en el cuerpo, lo que puede reducir el riesgo de enfermedades crónicas. Además, la cafeína, el principal componente activo del café, actúa como un estimulante del sistema nervioso central, mejorando la concentración y la alerta mental. Estudios han demostrado que el café puede contribuir a la salud del hígado y disminuir el riesgo de enfermedades como el hígado graso y la cirrosis.
Los riesgos del consumo excesivo de café
A pesar de sus beneficios, el consumo excesivo de café puede tener efectos negativos en la salud. La cafeína, al ser un psicoactivo, puede provocar insomnio, taquicardia, dolores de cabeza, nerviosismo y elevar la presión arterial. Además, algunas personas pueden experimentar problemas digestivos debido a la acidez del café. Estos efectos adversos subrayan la importancia de consumir café con moderación para evitar complicaciones de salud a largo plazo.
¿A qué edad debo dejar de tomar café?
Investigaciones de la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer (AAIC) sugieren que las personas deberían considerar dejar de consumir café a partir de los 60 años. Este estudio indica que el consumo regular de café en edades avanzadas puede estar asociado con un aceleramiento del deterioro cognitivo, afectando funciones esenciales como el pensamiento lógico, el razonamiento abstracto y el reconocimiento de patrones. Es importante destacar que esta recomendación está dirigida principalmente a personas que ya presentan algún deterioro cognitivo.
Sin embargo, para aquellos que no tienen problemas cognitivos, se aconseja limitar el consumo de café a no más de tres tazas al día. Además, la Autoridad Europea en Seguridad Alimentaria recomienda no exceder los 400 miligramos de cafeína diarios, lo que equivale aproximadamente a cuatro tazas de café.
Cómo consumir café de manera segura
Para aprovechar los beneficios del café mientras se minimizan sus riesgos, es esencial adoptar hábitos de consumo responsables:
- Modera tu ingesta: Limita el consumo a tres tazas diarias para evitar los efectos adversos de la cafeína.
- Elige café de calidad: Opta por granos de alta calidad y métodos de preparación que reduzcan la acidez.
- Evita el café en horas tardías: Consumir café por la tarde o noche puede interferir con el sueño.
- Mantén una dieta equilibrada: Acompaña el café con una alimentación rica en nutrientes para contrarrestar cualquier efecto negativo.
- Consulta a un profesional de la salud: Si tienes condiciones médicas preexistentes, es recomendable hablar con un médico sobre tu consumo de café.
Conclusión
El café, cuando se consume con moderación, puede ser una adición saludable a tu rutina diaria, ofreciendo beneficios significativos para la salud. Sin embargo, es crucial estar consciente de los riesgos asociados con el consumo excesivo, especialmente en edades avanzadas. Siguiendo las recomendaciones científicas y adoptando hábitos de consumo responsables, puedes disfrutar de tu taza de café favorita mientras proteges tu bienestar a largo plazo.
