A pesar del auge de herramientas accesibles como Canva, los diseñadores profesionales siguen apostando por Adobe. La compañía, conocida por su software de edición de imágenes y video, ha integrado inteligencia artificial (IA) en su ecosistema sin perder de vista las necesidades de los creativos. Con Firefly como su herramienta insignia, la empresa busca equilibrar la automatización con la personalización que exigen los profesionales del diseño.

Durante el Adobe Summit 2024, la compañía presentó avances en inteligencia artificial generativa (GenIA), destacando que su enfoque es ofrecer contenido “comercialmente seguro” sin comprometer la originalidad del trabajo creativo. Este equilibrio ha sido clave para mantener la confianza de los diseñadores, quienes, más que temer a la IA, la consideran una aliada que optimiza su flujo de trabajo sin reemplazar su talento.

Los números respaldan esta preferencia. Adobe reportó ingresos de 5,606 millones de dólares en el cuarto trimestre de 2024, un crecimiento del 11% interanual atribuido en gran parte a la adopción de IA en su ecosistema. Mientras tanto, Canva sigue ganando terreno en el mercado generalista con más de 1.6 millones de descargas en Estados Unidos solo en noviembre de 2024. Sin embargo, los creativos argumentan que las soluciones basadas en plantillas no pueden igualar la profundidad y flexibilidad de las herramientas de Adobe.

Sebastián Zúñiga, diseñador con más de 15 años de experiencia, asegura que su trabajo depende completamente del ecosistema Adobe. «Cuando era freelance, pagaba por los servicios porque me daban control absoluto sobre mis proyectos. La IA me ahorra tiempo, pero la creatividad sigue siendo mía», afirma. Esta visión es compartida por otros diseñadores como Itzel García, quien señala que herramientas como Canva facilitan la creación de contenido, pero no permiten desarrollar conceptos únicos.

Además del diseño gráfico, la IA está transformando la fotografía y la edición de video. Luis Gómez, especialista en contenido digital, comenta que en su empresa todavía se necesita a fotógrafos para sesiones de marca, aunque la IA puede generar imágenes rápidas para redes sociales. «La IA no es el problema, el reto es la comunicación entre equipos», señala, destacando que la automatización ayuda a optimizar tiempos, pero la visión creativa sigue dependiendo del factor humano.

Adobe ha sido clara en su postura: la IA es un complemento, no un sustituto. Mónica Lobato, Field Marketing Leader de la empresa, subraya que la compañía busca potenciar el trabajo de los diseñadores automatizando tareas mecánicas, sin quitarles el control sobre el proceso creativo. Prueba de ello es la integración de imágenes de iStock en Firefly, garantizando que el contenido generado con IA sea libre de derechos y que los colaboradores reciban compensaciones justas.

Con el lanzamiento de Adobe Experience Platform Agent Orchestrator, la compañía sigue apostando por conectar creatividad y negocio, mejorando la colaboración entre equipos multidisciplinarios. Mientras algunas plataformas buscan masificar la creatividad, Adobe mantiene su enfoque en los profesionales, asegurando que la IA no reemplace el talento humano, sino que lo potencie.