Villahermosa, la capital de Tabasco, ha pasado de ser un edén a ser percibida como la ciudad más insegura del país. Según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública (ENSU) del Inegi, el 95% de los habitantes consideran que vivir en su ciudad es inseguro, un aumento del 20% desde septiembre.

El asesinato del periodista Alejandro Gallegos es solo una muestra de la violencia que azota a Villahermosa. La ciudad ha sido escenario de bloqueos carreteros, ataques a bares, quema de negocios, ejecuciones, balaceras y narcomantas. La expansión del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y su disputa con el grupo criminal «La Barredora» han intensificado la violencia en la región.

El gobernador Javier May ha minimizado la percepción de inseguridad, afirmando que en sus recorridos por el estado ha percibido ánimo entre sus gobernados. Sin embargo, la realidad es que la violencia ha aumentado significativamente. En 2024, Tabasco registró 821 víctimas de homicidio, un incremento del 224% respecto al año anterior.

La disputa territorial entre el CJNG y «La Barredora» ha sido uno de los principales factores detrás del aumento de la violencia. «La Barredora» es un grupo criminal que se dedica al robo de combustible, tráfico de drogas y tráfico de personas6. La ruptura entre estos dos grupos ha llevado a una escalada de enfrentamientos y disturbios en la capital.

El gobernador May ha responsabilizado a sus antecesores por los niveles de violencia en la entidad y ha asegurado que no habrá pacto con el crimen. A pesar de sus declaraciones, la percepción de inseguridad sigue siendo alta y los ciudadanos esperan acciones concretas para mejorar la situación.