Por Juan Pablo Ojeda

El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha revelado que uno de sus principales planes para cuando asuma la Casa Blanca el próximo 20 de enero será la creación de un nuevo departamento: el «Servicio de Impuestos Externos». Este organismo tendrá como objetivo principal la recaudación de aranceles, derechos e ingresos provenientes de fuentes extranjeras, específicamente aquellas relacionadas con el comercio internacional.

Trump hizo este anuncio a través de una publicación en su red social, Truth Social, en la que criticó las políticas comerciales previas de su país. En su mensaje, señaló que los acuerdos comerciales previos habían permitido el crecimiento económico global, pero a costa de la economía estadounidense. “A través de acuerdos comerciales blandos y patéticamente débiles, la economía estadounidense ha entregado crecimiento y prosperidad al mundo, mientras nos gravábamos a nosotros mismos. Es hora de que eso cambie”, destacó el presidente electo.

El mandatario, quien asumirá oficialmente el cargo el 20 de enero de 2025, explicó que el nuevo departamento se encargará de recolectar todos los ingresos que provienen de las transacciones comerciales internacionales. «Empezaremos a cobrar a los que ganan dinero a costa nuestra con el comercio, y empezarán a pagar, FINALMENTE, su parte justa», afirmó Trump.

Además, el presidente electo subrayó que el establecimiento de este nuevo departamento es parte de su agenda para transformar la relación económica de Estados Unidos con otras naciones, buscando asegurar que las políticas comerciales sean más justas para su país. “El 20 de enero de 2025 será la fecha de nacimiento del Servicio de Impuestos Externos. ¡HAGAMOS QUE AMÉRICA SEA GRANDE OTRA VEZ!”, exclamó en su mensaje.

El anuncio de Trump se da en el contexto de sus planes más amplios de reformar las relaciones comerciales y de inmigración con países como México y Canadá. Trump ha reiterado que una de sus primeras órdenes ejecutivas será imponer un arancel del 25% a todos los productos provenientes de estos países hasta que se logren frenar las oleadas migratorias y el tráfico de drogas, particularmente el fentanilo, que según su administración, representa una amenaza para la seguridad nacional.

Este enfoque promete generar un impacto significativo en la política económica de Estados Unidos, además de reavivar el debate sobre la política comercial del país, la autonomía en la recaudación de impuestos y el equilibrio de poder con sus socios comerciales más cercanos.