Argentina a 7 de noviembre, 2024.- La tragedia que envolvió al cantante británico Liam Payne, exintegrante de la famosa banda One Direction, sigue generando conmoción y controversia. A casi un mes de su fallecimiento, la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°14 de Buenos Aires ha imputado a tres personas por su presunta implicación en los hechos que derivaron en la muerte del artista, ocurrida el 16 de octubre tras caer del balcón de su hotel en el barrio de Palermo.
Los tres imputados son un acompañante habitual de Payne durante su estancia en Argentina, un empleado del hotel Casa Sur donde ocurrió la tragedia, y un proveedor de sustancias ilícitas. La fiscalía argentina los acusa de delitos de abandono de persona seguido de muerte y suministro y facilitación de estupefacientes, luego de una exhaustiva investigación que incluyó el análisis de más de 800 horas de grabaciones de cámaras de seguridad, testimonios de testigos, y peritajes toxicológicos.
La investigación reveló que Payne habría estado bajo los efectos de alcohol, cocaína y un antidepresivo en las horas previas a su muerte. Según los peritajes médicos, el cantante no adoptó una postura refleja para amortiguar la caída, lo que sugiere que pudo haber estado en un estado de semi o total inconsciencia al momento de caer del balcón, descartando la posibilidad de un acto voluntario.
El acompañante de Payne, quien convivió estrechamente con él durante su estancia, está señalado por abandono de persona y suministro de sustancias. El segundo acusado, un empleado del hotel, es sospechoso de haber proporcionado cocaína al músico. Finalmente, el tercer implicado habría suministrado estupefacientes en al menos dos ocasiones durante su estadía en Buenos Aires.
La fiscalía ha ordenado la detención de los tres implicados, y aunque las pruebas reunidas hasta el momento son contundentes, la investigación sigue abierta. Los investigadores aún buscan desbloquear una netbook personal de Payne y otros dispositivos electrónicos incautados para obtener más detalles sobre las circunstancias de su muerte.
Después de los estudios forenses y toxicológicos, el cuerpo de Liam Payne fue embalsamado en el Cementerio Británico de Buenos Aires y trasladado a Londres en un vuelo de British Airways. La noticia de su partida ha devastado a sus seguidores y a la industria musical, que continúa recordando su impacto en la música y su carisma en el escenario.
La muerte de Liam Payne plantea nuevamente un debate sobre la importancia de la salud mental y el impacto de la fama en los jóvenes artistas. Los fans de Payne y la comunidad artística esperan que la justicia argentina avance en esclarecer los hechos y que, de alguna forma, este triste desenlace impulse acciones para prevenir tragedias similares en el futuro.