Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, detalló este miércoles en su conferencia mañanera en Palacio Nacional el «Plan D» que su administración tenía preparado en caso de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) hubiera decidido invalidar parcialmente la reforma al Poder Judicial de la Federación.
Sheinbaum explicó que, si la Corte hubiera desechado la reforma, su plan habría consistido en presentar una nueva iniciativa judicial ante el Congreso, aunque con dos modificaciones clave: eliminar el haber de retiro para los ministros y proceder con el nombramiento de un nuevo juez constitucional tras la salida del ministro Luis María Aguilar, quien dejará su cargo el 30 de noviembre de este año.
«Si se hubiera mantenido este bloque de ministros que representaba al viejo régimen, querían ponernos en una situación de desacato a una resolución de la Corte. Entonces, decidimos que íbamos a ir con el Plan D», reveló la mandataria, quien subrayó que, a pesar de la postura de algunos miembros de la Corte, su gobierno estaba decidido a avanzar con la reforma judicial.
El Plan D: Reformar, Sin Sacrificar el Fondo
El «Plan D», según Sheinbaum, estaba diseñado para evitar una confrontación directa con el Poder Judicial, pero a la vez, asegurar que el proceso de transformación del país siguiera su curso. En lugar de aceptar un retroceso en la reforma, la propuesta habría incluido dos puntos fundamentales: primero, la elección del octavo ministro del Supremo Tribunal, dado que el ministro Luis María Aguilar dejaría su puesto en noviembre, y segundo, la eliminación del beneficio del haber de retiro para los ministros, como parte de una estrategia para modernizar y fortalecer el Poder Judicial.
«Lo que queríamos era evitar un enfrentamiento innecesario. Si la Corte no validaba la reforma, nuestra opción era ir con un nuevo proyecto al Congreso. De todas formas, la reforma ya estaba planteada para seguir avanzando», explicó Sheinbaum.
A pesar de que este Plan D era una vía alterna, la presidenta destacó que no fue necesario implementarlo, ya que la Corte desestimó la invalidación de la reforma y, en consecuencia, se ratificaron las modificaciones a la estructura del Poder Judicial que permitirán, entre otras cosas, la elección por voto popular de jueces y magistrados.
Una Victoria para la Democracia y el Pueblo Mexicano
En cuanto a la decisión de la Suprema Corte, Sheinbaum celebró la resolución de los ministros, al considerar que se trató de un triunfo para la democracia y la «fuerza de la razón», frente a lo que calificó como «irracionalidad» por parte de quienes se oponían a los cambios. La reforma, que incluye la elección popular de jueces y magistrados, fue vista por la mandataria como una medida que fortalecerá la justicia y acercará más a los ciudadanos al proceso judicial.
“Estoy muy contenta, ayer triunfó el pueblo de México. Ganó la fuerza de la razón, la cordura frente a la irracionalidad”, destacó Sheinbaum, al tiempo que recordó que la elección de jueces y magistrados será efectuada por voto popular a partir del 1 de junio de 2025.
La reforma al Poder Judicial, una de las iniciativas más ambiciosas de la actual administración, busca transformar el sistema judicial del país y garantizar que el Poder Judicial se mantenga alineado con los intereses y necesidades del pueblo mexicano. «La transformación del país es profunda, y es para el bien de todas y todos los mexicanos», concluyó Sheinbaum.
La controversia sobre la reforma judicial y las disputas sobre la elección de jueces reflejan la profunda división en el debate político mexicano sobre cómo debe operar el sistema judicial. La mandataria, no obstante, reafirmó que el país está en un proceso de transformación y que las decisiones tomadas seguirán en beneficio de los ciudadanos.