Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, ha anunciado la nominación de Chris Wright, CEO de Liberty Energy, como secretario de Energía. Wright, conocido defensor de los combustibles fósiles y megadonante republicano, representa una clara apuesta de la administración entrante por consolidar el «dominio energético» del país mediante una estrategia centrada en el sector privado.
Trump destacó que esta nominación busca fortalecer la inversión privada, reducir la inflación y posicionar a Estados Unidos como líder global, no solo en energía, sino también en áreas como la Inteligencia Artificial y la diplomacia. Una de las tareas clave de Wright será liderar el nuevo Consejo Nacional de Energía, que integrará las funciones de diversas agencias gubernamentales relacionadas con la producción, distribución y regulación energética.
Chris Wright ha expresado abiertamente su escepticismo sobre la crisis climática, argumentando que los combustibles fósiles son fundamentales para la economía y la seguridad energética. En entrevistas pasadas, ha criticado las políticas de transición a energías limpias, señalando que podrían desestabilizar la economía y poner en riesgo el liderazgo global de Estados Unidos.
Este nombramiento ha generado reacciones encontradas. Mientras los aliados republicanos celebran la decisión como una forma de priorizar los intereses económicos nacionales, los defensores del medio ambiente ven este movimiento como un retroceso en la lucha contra el cambio climático.
La confirmación de Wright dependerá del Senado, actualmente bajo control republicano. Si logra los votos necesarios, este empresario petrolero será clave para implementar las políticas energéticas de Trump, que ya han generado controversia, especialmente por su enfoque en los combustibles fósiles y su postura ante la crisis climática.
Este nombramiento se suma a otros movimientos polémicos de Trump, que incluyen figuras con fuerte lealtad a sus posturas políticas y habilidades mediáticas, además de un respaldo absoluto a iniciativas como las deportaciones masivas y la promoción del sector privado en áreas clave.