Por Bruno Cortés
En un fallo que está dando mucho de qué hablar, cinco ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación decidieron no admitir los juicios interpuestos por los partidos en contra de la reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Con esta decisión, la reforma que propone la elección popular de jueces y magistrados sigue en pie, marcando un cambio importante en la estructura del sistema judicial en el país.
La votación de los ministros fue una muestra de las divisiones internas y las intensas discusiones que rodean a esta reforma. Aunque el proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá propuso invalidar ciertos puntos clave, no alcanzó los ocho votos necesarios para hacerlo. El ministro Alberto Pérez Dayán, junto con las ministras Loretta Ortiz Ahlf, Lenia Batres y Yasmín Esquivel, se mantuvieron firmes en su postura de no proceder con la invalidación, dándole así un respiro al Ejecutivo y manteniendo la reforma vigente.
Para Ricardo Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política, este fallo fue una victoria, una prueba de que el “Estado de derecho” prevalece y de que los intentos de frenar la reforma desde la oposición no lograron romper el sólido bloque en la Corte.
Las implicaciones de esta decisión son grandes, y el ambiente político está en ebullición. Por un lado, Morena ha insinuado la posibilidad de juicios políticos para aquellos ministros que votaron en contra de la reforma, y del otro, algunos líderes del Senado han amenazado con no acatar ninguna resolución que busque invalidarla en el futuro. Este escenario plantea un panorama de posibles tensiones entre el Poder Judicial y el Ejecutivo.
¿Quieres conocer los detalles de esta reforma y el impacto de esta decisión en el panorama político de México? Este artículo es para ti, donde desmenuzamos las reacciones, los conflictos y las implicaciones de este importante fallo de la SCJN.