Por Bruno Cortés
En el Congreso Mexicano, las reformas en materia energética han vuelto a ser tema de discusión, especialmente después de que el diputado Ricardo Monreal Ávila, coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, diera a conocer que se trabajará en una serie de leyes secundarias que refuercen el carácter público de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE). El objetivo, según Monreal, es revertir décadas de privatización y asegurar que estas dos empresas estratégicas trabajen en beneficio directo de todos los mexicanos.
Monreal explicó en una conferencia de prensa celebrada en Guadalajara que al menos cinco leyes clave se modificarán o crearán para dar fuerza a esta agenda. Entre ellas se encuentran la Ley de la Empresa Pública del Estado, la Ley de los Servicios de Hidrocarburos, la Ley de Ingresos de Hidrocarburos, la Ley del Fondo Mexicano del Petróleo y la Ley de Desarrollo Bioenergético. Estas modificaciones buscan no solo asegurar que Pemex y CFE operen como empresas públicas al servicio de la nación, sino también generar un marco normativo que impulse el desarrollo de energías más limpias y eficientes, algo que se vuelve crucial frente a los retos que presenta el cambio climático.
El diputado señaló que esta propuesta de reformas también busca corregir las políticas que permitieron la privatización de recursos clave para el país durante los últimos años, políticas que, según él, no han beneficiado a la mayoría de los mexicanos. “Lo que estamos buscando es que Pemex y CFE no sean solo empresas que generen ganancias, sino que trabajen para el bienestar de todos los ciudadanos”, afirmó Monreal.
Estas reformas son parte de un paquete legislativo más amplio que Morena llevará al Congreso a partir del 1 de febrero, cuando inicia el segundo periodo de sesiones de la LXVI Legislatura. Entre las leyes que se discutirán, se encuentran reformas en temas como la reelección de servidores públicos, la lucha contra el nepotismo, el fortalecimiento de órganos reguladores en materia energética, y diversas reformas en el ámbito de la seguridad pública y la inclusión.
Aunque no se discutirá una reforma electoral integral en este periodo, como algunos esperaban, el enfoque principal será avanzar en las leyes reglamentarias que derivan de reformas constitucionales previas, que buscan actualizar y reforzar el marco normativo del país.
Además, Monreal aprovechó la ocasión para reiterar el respaldo de la bancada de Morena a las acciones de la presidenta Claudia Sheinbaum, especialmente frente a las amenazas de políticas migratorias y comerciales del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. El coordinador de Morena señaló que el Congreso mexicano se ha alineado con las decisiones de la presidenta para defender la soberanía nacional y los derechos de los mexicanos en el exterior.
Por su parte, el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna, señaló que, aunque se buscó un acuerdo para que todos los grupos parlamentarios se unieran en apoyo a la presidenta, solo Morena, el PT, el PVEM y MC se comprometieron a respaldar las acciones del gobierno federal. Criticó la postura del PRI y el PAN, a quienes acusó de anteponer cálculos políticos antes que el bienestar de los mexicanos.
A nivel interno, también se anunciaron cambios en la estructura del grupo parlamentario, destacando el nombramiento de Alberto Maldonado como coordinador y enlace legislativo en Jalisco. Monreal calificó este nombramiento como un signo de unidad y madurez dentro de la bancada de Morena.
Con todo esto, las reformas energéticas que se vienen representan no solo un intento de recuperar el control de recursos clave como el petróleo y la electricidad, sino también una apuesta por garantizar que las empresas del Estado operen en beneficio de la mayoría de los mexicanos, alejándose de las políticas privatizadoras que, según los legisladores de Morena, solo han favorecido a unos pocos.
