El nacimiento de una leyenda
En 1957, Germán Robles debutó como el Conde Karol de Lavud en El Vampiro, una película que no solo lo catapultó al estrellato internacional, sino que también redefinió el cine de terror en México. Con su mirada penetrante y su aura misteriosa, Robles se convirtió en el rostro del horror fantástico, llevando su personaje a festivales de cine y recibiendo homenajes en América y Europa.
La secuela, El Ataúd del Vampiro, consolidó su legado, mientras que El Castillo de los Monstruos lo mostró en un tono más irónico, persiguiendo al cómico Clavillazo. Aunque el vampiro lo definió, Robles demostró su versatilidad en géneros como el drama y la comedia.
De vampiro a héroe: Los años 70 y más allá
En la década de 1970, Robles reinventó su carrera. En Los Vampiros de Coyoacán, compartió pantalla con el luchador Mil Máscaras y Sasha Montenegro, interpretando a un enemigo de los chupa sangre. Además, destacó en películas como El Jardín de la Tía Isabel y El Tigre de Santa Julia, demostrando su talento en roles más serios y dramáticos.
Su voz también lo hizo inmortal. Como actor de doblaje, prestó su talento a producciones como El Auto Increíble, Ratatouille y El Planeta del Tesoro, ganándose el respeto de la industria.
El legado de un ícono
Germán Robles no solo fue un vampiro en la pantalla; fue un artista completo que brilló en el teatro, el cine y el doblaje. Su interpretación en La Dama de Negro durante los años 90 dejó una huella imborrable en el teatro mexicano.
Aunque su personaje más icónico regresaba siempre a su ataúd, Robles logró algo que pocos consiguen: la inmortalidad en el corazón de sus fans. Gracias al DVD y la televisión, nuevas generaciones seguirán viendo al Conde Karol de Lavud, el vampiro que nunca muere.
Germán Robles fue más que un actor; fue un símbolo del cine fantástico mexicano. Su legado perdura no solo en sus películas, sino en la memoria de quienes lo admiraron. ¿Cuál es tu escena favorita de este ícono del terror? Comparte tus recuerdos y celebra su inmortalidad.
¿Recuerdas la primera vez que viste a Germán Robles como el Conde Karol de Lavud? Déjanos tu comentario y comparte esta nota para mantener viva su leyenda.
