El Amaranto: Un Superalimento con Beneficios Invaluables para la Salud
Por Juan Pablo Ojeda
Entre las semillas y granos que han ganado popularidad en la alimentación moderna, el amaranto está destacándose por su impresionante perfil nutricional y sus diversos beneficios para la salud. Aunque las semillas de lino, chía y sésamo son las más conocidas, el amaranto, un pseudocereal cultivado desde hace más de 4.000 años por civilizaciones como los aztecas, mayas e incas, está ganando terreno gracias a sus propiedades funcionales y su versatilidad en la dieta.
Beneficios Nutricionales del Amaranto
El amaranto es una fuente excelente de proteínas, superando a muchos cereales tradicionales en contenido proteico. Según un estudio realizado por los investigadores Neelesh Kumar Maurya y Pratibha Arya, el grano de amaranto contiene una cantidad significativa de lisina, un aminoácido esencial en el que muchos otros cereales son deficientes. Esto lo convierte en una proteína de alta calidad, ideal para dietas vegetarianas y veganas.
Además de su alto contenido proteico, el amaranto es rico en grasas saludables, especialmente ácidos grasos insaturados como el ácido linoleico, que son esenciales para la salud cardiovascular. Las investigaciones sugieren que estos ácidos grasos, junto con la fibra soluble y fitoquímicos como los fitosteroles y tocotrienoles, pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol malo (LDL) y mejorar la salud del corazón.
Efectos Positivos en la Salud
El consumo de amaranto ha sido vinculado con una variedad de beneficios para la salud, muchos de los cuales se deben a su riqueza en antioxidantes, fibra y compuestos bioactivos. Entre los principales efectos beneficiosos se incluyen:
- Reducción de colesterol: El amaranto ha demostrado ser eficaz en la reducción de los niveles de colesterol LDL y total. Esto se debe a su alto contenido de ácidos grasos insaturados, fibra y fitoquímicos, los cuales actúan en conjunto para mejorar los perfiles lipídicos en sangre.
- Actividad antitumoral: Diversos estudios indican que las lectinas del amaranto pueden tener propiedades antiproliferativas, inhibiendo el crecimiento de células tumorales, especialmente en el sistema gastrointestinal. Esta propiedad ha generado interés en el potencial del amaranto como complemento en terapias contra el cáncer.
- Control de glucosa: El amaranto ha mostrado potencial para reducir los niveles de glucosa en sangre, lo que podría ser beneficioso para personas con diabetes o aquellas que buscan mejorar la regulación del azúcar en su organismo.
- Mejora la función hepática: El grano de amaranto y su aceite han demostrado ser efectivos en la mejora de los niveles de enzimas hepáticas, marcadores clave de la salud del hígado, y en la reducción de la peroxidación lipídica, un factor que contribuye al daño celular.
- Propiedades antioxidantes: El amaranto contiene compuestos fenólicos que tienen una fuerte actividad antioxidante, lo cual ayuda a reducir el estrés oxidativo en el cuerpo, contribuyendo a la prevención de enfermedades crónicas y el envejecimiento celular.
- Salud intestinal: Gracias a su alto contenido en fibra, el amaranto mejora el tránsito intestinal, reduce la hinchazón y previene el estreñimiento, además de proteger contra el cáncer de colon, una de las formas más comunes de cáncer gastrointestinal.
- Control de peso: La combinación de alta proteína y fibra del amaranto favorece la saciedad, lo que puede ayudar en el control del peso, siendo un excelente aliado en dietas para perder grasa corporal.
El Amaranto como Alimento Funcional
El potencial del amaranto como alimento funcional es cada vez más reconocido. Su capacidad para aportar nutrientes esenciales como proteínas completas, fibra, antioxidantes, y grasas saludables lo convierte en un alimento ideal para quienes buscan mejorar su salud cardiovascular, intestinal, y metabólica. Además, debido a su perfil nutricional, el amaranto puede ser utilizado como una alternativa para personas con intolerancia al gluten, ya que es naturalmente libre de este componente.
El Futuro del Amaranto en la Alimentación Global
El amaranto ha sido estudiado principalmente en modelos animales, pero los resultados preliminares apuntan a un gran potencial para la salud humana. Investigaciones futuras, especialmente estudios epidemiológicos, serán clave para entender mejor sus efectos a largo plazo y su aplicabilidad como parte de una dieta saludable a nivel mundial.
Conclusión
El amaranto está emergiendo como un superalimento con propiedades excepcionales, no solo por su alta calidad nutricional, sino también por los múltiples beneficios para la salud que ofrece. Desde la mejora de la salud cardiovascular hasta la prevención del cáncer y el control de glucosa, este pseudocereal antiguo tiene un gran potencial para ser un pilar en dietas saludables. Incorporarlo en nuestra alimentación diaria es una excelente forma de aprovechar sus propiedades y mejorar nuestra salud general.