La captura de Itania Noemí “N”, presunta líder de una célula del Cártel del Pacífico en Manzanillo, representa un golpe importante en la lucha contra la violencia que ha azotado a Colima en los últimos años. Identificada como la principal generadora de violencia en la ciudad portuaria, Itania Noemí “N” fue detenida en Guadalajara, Jalisco, tras un operativo coordinado entre diversas autoridades federales, incluyendo la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), el Ejército, la Marina y la Guardia Nacional.
La detención de Itania Noemí “N” se dio en medio de un dispositivo de seguridad luego de labores de inteligencia que la ubicaron en Guadalajara, su “lugar de movilidad” y centro operativo. Al momento de su captura, intentó huir, pero fue interceptada por los agentes. Según las autoridades, esta mujer estaba encargada del tráfico de drogas y de coordinar acciones delictivas que generaban un clima de inseguridad y violencia en Manzanillo, una ciudad clave para el tráfico en el Pacífico.
Además, la detenida contaba con una orden de aprehensión emitida en septiembre de 2021 por delitos contra la salud y la ley federal de armas de fuego, confirmando su posición como operadora logística del grupo criminal en Colima. Tras su captura, fue puesta a disposición del Ministerio Público, que definirá su situación jurídica en los próximos días.
Colima ha sido uno de los estados con altos índices de violencia en México. Entre enero y septiembre de 2024, el estado reportó 631 víctimas de homicidio doloso, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. En el inicio de noviembre, el país registró 88 homicidios dolosos en un solo día, destacando a Colima entre los estados con mayor incidencia, junto a Guanajuato, Morelos, Guerrero y Jalisco.
Además de los homicidios, Colima enfrenta otro grave problema: las desapariciones. De acuerdo con la Comisión Nacional de Búsqueda, en la entidad hay registro de 1,314 personas desaparecidas o no localizadas, una cifra alarmante que refleja la crisis de seguridad que se vive en el estado.
La captura de Itania Noemí “N” es el resultado de un esfuerzo conjunto de distintas corporaciones de seguridad que han intensificado sus acciones en Colima y Jalisco, dos estados con una alta actividad delictiva relacionada con el narcotráfico. Las autoridades señalaron que continuarán con las investigaciones para desmantelar las redes criminales que operan en el Pacífico y reducir los índices de violencia en la región.