Por Juan Pablo Ojeda
Organizaciones feministas y de derechos civiles en Estados Unidos han convocado una masiva manifestación nacional para el 18 de enero de 2025, dos días antes de la investidura de Donald Trump como presidente, programada para el 20 de enero. La protesta, que se celebrará en la capital estadounidense, coincide con el inicio de su segundo mandato, luego de una controvertida victoria electoral frente a la vicepresidenta Kamala Harris.
El llamado ha sido realizado por diversas entidades feministas y de justicia social que, al igual que en su primer mandato, buscan alzar sus voces contra lo que consideran una agenda política antidemocrática y patriarcal impulsada por el nuevo gobierno republicano. En particular, se destaca la participación de la organización Women’s March (Marcha de las Mujeres), que fue responsable de la histórica manifestación del 21 de enero de 2017, el primer día del mandato de Trump, que reunió a más de medio millón de personas en las calles de Washington D.C.
Según informes del diario The Washington Post, las entidades organizadoras estiman que aproximadamente 50,000 personas se sumarán a esta protesta, denominada ‘Marcha del Pueblo sobre Washington’. Este evento será clave para manifestar el rechazo al regreso de Trump a la Casa Blanca y a sus políticas, que según las organizaciones feministas, continúan atacando los derechos civiles y reproductivos de las mujeres y de las minorías en el país.
Reacción feminista ante la investidura de Trump
Las convocantes de la marcha han subrayado la importancia de una respuesta organizada y contundente ante lo que consideran un gobierno que representa una amenaza para los derechos de las mujeres y la democracia. En un comunicado, Women’s March dejó claro que la marcha es una respuesta al «patriarcado racista» que sigue siendo sostenido por los sistemas de poder de derechas. «Estamos furiosas. No tenemos miedo. Formamos parte de un movimiento que es más grande que cualquiera de nosotras», expresaron.
La organización de esta protesta responde no solo a la investidura de Trump, sino a la necesidad de movilizarse frente a lo que las activistas consideran una agenda reaccionaria que buscará desmantelar los avances conseguidos en materia de derechos civiles y reproductivos en la última década. Las activistas han declarado que Trump y su partido “no perderán el tiempo” al promover políticas que ponen en peligro los derechos fundamentales de las mujeres.
Marcha histórica de 2017 y futuro incierto
En 2017, la Marcha de las Mujeres fue un hito en la historia de las movilizaciones feministas de Estados Unidos. Más de medio millón de personas se unieron en una protesta pacífica que, a pesar de las restricciones de ruta, cubrió gran parte del centro de Washington. Esta manifestación marcó el inicio de un movimiento de resistencia contra la presidencia de Trump, el cual se expandió a nivel mundial con marchas en más de 80 países.
Este tipo de manifestaciones siguen siendo un símbolo de la resistencia feminista, que ha demostrado su capacidad de convocar a miles de personas dispuestas a luchar por la igualdad de género, los derechos reproductivos, y una democracia más inclusiva.
La lucha feminista sigue vigente
Las organizaciones feministas han dejado claro que este no es el único evento que marcará el comienzo de un año lleno de protestas. El 9 de noviembre de 2024, un mes antes de la investidura de Trump, se realizará una manifestación adicional, donde se prevé que las activistas se concentrarán en las calles de todo el país para reafirmar su compromiso con la lucha. El objetivo es “no ser silenciadas” por las políticas de la nueva administración republicana.
“Juntas, en hermandad y solidaridad, afirmamos nuestro compromiso mutuo para la larga lucha”, manifestaron las organizadoras, haciendo énfasis en la necesidad de mantenerse firmes en la defensa de los derechos de las mujeres, la igualdad racial, y los derechos reproductivos.
Fecha clave: 18 de enero de 2025
La Marcha del Pueblo sobre Washington, que tendrá lugar en el sábado previo a la investidura de Trump, se anticipa como una de las manifestaciones más relevantes en la historia reciente del activismo feminista en Estados Unidos. Las activistas advierten que, a pesar de los desafíos que enfrentan en la lucha por la igualdad, el movimiento feminista seguirá creciendo y fortaleciendo su presencia en la política estadounidense.