El tenor mexicano Ramón Vargas brilló con intensidad en la Gala Ramón Vargas, celebrada el jueves 4 de julio en el Palacio de Bellas Artes. Este evento, parte de las festividades por el 90 aniversario del emblemático recinto, fue una ocasión sublime donde Vargas, acompañado del pianista Ángel Rodríguez y el Coro del Teatro de Bellas Artes, cautivó al público con un programa operístico excepcional.
Bajo la organización de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), a través de la Compañía Nacional de Ópera (CNO), la gala no solo honró la trayectoria del tenor, sino que también destacó por su emotividad y calidad artística.
Lucina Jiménez López, titular del Inbal, expresó su gratitud hacia Ramón Vargas por su brillante participación y contribución a este evento conmemorativo. El público respondió con ovaciones constantes, demostrando su deleite ante las interpretaciones magistrales de Vargas, que incluyeron obras de destacados compositores como Donizetti, Rossini, Verdi, Tosti, Puccini, así como piezas emblemáticas del repertorio mexicano de Lara, Grever, Velázquez, y un popurrí de Manzanero.
Uno de los momentos más emocionantes de la noche fue el dueto de Vargas con la soprano María Katzarava, quienes cautivaron al auditorio con «Libiamo ne’lieti calici» de La traviata de Verdi. Además, el Coro del Teatro de Bellas Artes impresionó con su interpretación de «Coro a bocca chiusa» de Madama Butterfly, sumando un toque de magia a la velada.
Con «Una furtiva lágrima» de El elixir de amor de Donizetti, acompañado por Ángel Rodríguez al piano, Ramón Vargas cerró la noche en un apoteósico climax, recordando así el inicio de una carrera marcada por el talento y la pasión por la ópera.
La Gala Ramón Vargas no solo celebró la maestría vocal del tenor, sino que también reafirmó la importancia del Palacio de Bellas Artes como epicentro cultural de México, uniendo arte, historia y emociones en una noche para recordar.