El diputado Héctor Saúl Téllez Hernández (PAN) aseveró que el Tren Maya ha resultado, al igual que otras obras insignia del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, como el AIFA y la refinería Dos Bocas, una obra sin planeación, con un avance físico menor a lo proyectado y con un sobrecosto que ya rebasa en un 90 por ciento lo planteado al inicio.
Además, señaló en un comunicado, lo más grave es que bajo argumento de seguridad nacional, se reanudó la construcción en un tramo que tenía una suspensión judicial.
“Es muy lamentable que el Consejo de Seguridad Nacional catalogara al Tren Maya como una obra de seguridad nacional; esto es una argucia legal que utiliza el gobierno de la 4T para hacer trampa y evadir el cumplimiento de la ley. Exigimos que se den a conocer los criterios que se utilizaron y sus alcances para evadir la ley y los permisos ambientales”, abundó.
El también secretario de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados recordó que el gasto público ejercido desde el inicio de la obra ha sido desordenado, desaseado y con falta de planeación.
“La falta de planeación y el derroche de recursos en el Tren Maya es verdaderamente insultante, ahora se nos anuncia que habrá un sobrecosto de más de 90 por ciento en esta obra. Primero dijeron que costaría alrededor de 120 mil millones de pesos; después las proyecciones marcan que pasará de los 200 mil millones; este capricho presidencial sale muy caro”.
Agregó que de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) se hizo una modificación al presupuesto aprobado, aumentándolo de 62 mil 942 millones de pesos, a 73 mil 372 millones de pesos, es decir, 10 mil millones de pesos extras para este año.
“Esto resulta injustificado y desproporcionado si se toma en cuenta que, según la SHCP, el avance físico de este proyecto es de un 28.3 por ciento, de acuerdo con el Primer Informe Trimestral 2022”, aseveró.
Téllez Hernández manifestó que a finales de 2018 el ex titular del Fondo Nacional al Fomento al Turismo, Rogelio Jiménez Pons, comentó que el costo total de este proyecto sería aproximadamente de 120 mil millones de pesos y después el total ascendería a 167 mil 341 millones de pesos, es decir 47 mil millones más.
“Ante los cambios que ha sufrido este proyecto por la inviabilidad de sus rutas, antes de dejar el cargo Rogelio Jiménez Pons, en una comparecencia en el Senado en octubre de 2021, comentó que el costo total de la obra sería de hasta 230 mil millones de pesos. En tan solo tres años ha tenido un sobrecosto de 110 mil millones de pesos, poco más del 90 por ciento”, asentó.
Asimismo, como resultado de la mala planeación, se realizó un cambio de trazo de la ruta del Tren Maya en el tramo Cancún-Playa del Carmen y la cancelación de los trabajos ya avanzados, deja como saldo aproximadamente 20 mil árboles talados y 478 millones de pesos invertidos tirados a la basura.
“El Gobierno Federal pretende imponer a como dé lugar una de sus obras insignias, que al igual que el AIFA y la refinería Dos Bocas, son obras que exceden por mucho el presupuesto planteado inicialmente, que se inauguran a medias y que no tienen absolutamente ninguna utilidad pública”, concluyó el panista.