Además de su delicioso olor y sabor, el café tiene propiedades que podrían ayudarte a tener un mejor funcionamiento en un órgano cuyo deterioro avanza más lentamente al beberlo.
De acuerdo con información de la Clínica Mayo, las personas que tienen enfermedad del hígado graso no alcohólico que indicaron beber dos o más tazas de café al día tuvieron menos daño hepático que quienes no lo hicieron.
El Journal of Hepatology publicó los resultados del Estudio de Rotterdam en donde se concluyó que el consumo de café se relacionó con la presencia de una menor rigidez hepática.
Pero este no el único beneficio de la bebida. De acuerdo con información del Gobierno de México, el café, además de ayudar a prevenir el cáncer de hígado, protege contra la diabetes y otras afecciones:
Previene la enfermedad de Parkinson.
Con moderación protege contra la insuficiencia cardiaca.
Reduce el riesgo de accidente cerebrovascular.
Protege contra el deterioro de la visión.
Protege contra el cáncer de próstata.