CDMX a 30 de abril, 2024.- En un día marcado por celebraciones y un aire de justicia largamente esperada, la diputada Salma Luévano Luna, junto con activistas y representantes de organizaciones civiles LGBTIQ+, aplaudió la reciente aprobación por el Senado de la República de la prohibición de las terapias de conversión de orientación sexual e identidad de género, conocidas como ECOSIG. Este triunfo legislativo, alcanzado el 26 de abril, marca un paso significativo en la protección de los derechos humanos en México.
Durante una conmovedora rueda de prensa, Luévano Luna, quien preside la Comisión de Diversidad, destacó la lucha incansable que llevó a este logro. «Después de más de cinco años, se hace justicia para todas aquellas víctimas que, en su momento, padecieron las mal llamadas terapias de conversión», afirmó la diputada de Morena. Según Luévano, estos procedimientos se basaban en la errónea y perjudicial creencia de que la homosexualidad y la diversidad de género son enfermedades curables.
Iván Tagle, director general de YAAJ México, una de las organizaciones involucradas en la lucha contra las ECOSIG, compartió experiencias dolorosas de individuos que fueron sometidos a estas prácticas. Tagle subrayó la importancia de la colaboración interseccional que llevó al éxito de este dictamen, gracias al esfuerzo conjunto de diversas organizaciones y representantes legislativos.
La prohibición de las ECOSIG no solo simboliza un avance legal, sino también cultural, al reconocer oficialmente que la diversidad de orientación sexual e identidad de género no requiere cura ni corrección. “Nada que curar”, resonó como un grito de victoria entre los presentes, recordando a la sociedad que ser diferente no es sinónimo de enfermedad ni crimen.
Esta legislación pone a México en línea con las normas internacionales de derechos humanos, prohibiendo cualquier trato cruel, inhumano y degradante basado en la orientación sexual o identidad de género de una persona. Es un claro mensaje de que el país está comprometido con la protección y el respeto de todas las personas, independientemente de su identidad.