El Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, propondrá amparar y con ello ordenar la inmediata libertad de Gonzalo García, Juan Luís López y Héctor Muñoz, quienes fueron detenidos en 2015 por presunto secuestro, un delito que no cometieron, como lo revela Duda razonable: Historia de dos secuestros, la miniserie de Netflix dirigida por Roberto Hernández.
Se espera que el proyecto sea discutido la próxima semana, luego de que el pleno de la Suprema Corte determinara que el caso de los tres hombres y Darwin Morales podría estar plagado de irregularidades y violaciones a sus derechos.
El Ministro Ortiz Mena propondrá al pleno de la Corte otorgar amparo liso y llano bajo el argumento de que el tribunal de justicia oral que dictó la sentencia “realmente nunca tuvo frente así evidencia aportada por la Fiscalía que corroborara de manera robusta y suficiente el hecho delictivo materia de juicio”.
El caso fue atraído por la SCJN en febrero pasado, luego de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador solicitara al Secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, y a la Suprema Corte que se investigara a fondo el suceso.
“Existe una petición formal ya de los abogados de quienes están sujetos a proceso para que se obvie el procedimiento y la SCJN pueda atraer el caso. Adicionalmente a ello hay abiertas investigaciones sobre exfuncionarios en este caso de la Fiscalía Estatal que lo fueron entre 2012 y 2018, estaríamos a la espera de que la autoridad judicial emita su resolutivo”, dijo el mandatario en una conferencia de prensa realizada el 30 de diciembre de 2021.
La miniserie documental, estrenada el 23 de noviembre en Netflix, explora la historia de Gonzalo García, Juan Luis López, Darwin Morales y Héctor Muñoz, quienes fueron acusados del secuestro de una mujer, un delito que no cometieron. La detención se dio en 2015, los cuatro hombres fueron torturados.
Todo inició en dicho año con un accidente de tráfico en donde Héctor recibió un disparo en la mano cuando le reclamó al conductor del vehículo que lo impactó, este personaje fue quien después declaró ante las autoridades que pasó exactamente lo mismo, pero al revés, y que lo iban a secuestrar.
A los cuatro se les impuso una condena de 50 años, pese a que no existía ninguna prueba más allá del testimonio del otro conductor.Únicamente Darwin ha logrado salir de prisión porque su defensa probó que él se encontraba en otro lugar en el momento de los hechos.