Ante el Pleno del Senado de la República, la secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, afirmó que los programas de bienestar amortiguaron el impacto económico y social en los hogares mexicanos, derivados de la pandemia, ya que, a pesar de esta circunstancia, se consiguió que el ingreso familiar creciera en las zonas rurales 3.8 por ciento.
Montiel Reyes compareció como parte del análisis del IV Informe de Gobierno del Ejecutivo federal, para dar cuenta de los programas sociales que impactan a la población y sus comunidades.
El presidente de la Mesa Directiva, Alejandro Armenta Mier, explicó que esta comparecencia se realiza bajo los principios constitucionales que establece la relación corresponsable entre los Poderes Ejecutivo y Legislativo. Posteriormente, tomó la protesta de decir verdad a la funcionaria.
En su intervención inicial, Ariadna Montiel destacó que los programas sociales benefician a las familias, sus derechos y sus ingresos, ya que construyen economías circulares, porque ya no son una dádiva, sino un derecho consagrado en la Constitución.
Destacó que, en estos cuatro años se logró que el Estado recuperara su papel como principal garante de derechos, a través de una política que trabaja de la mano con las comunidades y reconstruye el tejido social.
La funcionaria refirió que, hasta el mes de junio de este año, la Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores ya beneficiaba a 10 millones 500 mil adultos mayores que cuentan con una pensión de tres mil 850 pesos bimestrales y anualmente cada uno recibe 23 mil 100 pesos.
Durante este gobierno, apuntó, se incorporaron a cinco millones y medio de nuevos derechohabientes a esta pensión, es decir, se duplicó el padrón, por lo que “en todos los rincones del país no hay una localidad, por pequeña que sea, que no cuente con este programa”.
Ariadna Montiel destacó que las personas con discapacidad fueron invisibles para los gobiernos del pasado; por eso, en el Gobierno de México se implementó la Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad, a fin de dar un primer paso en la lucha por sus derechos.
Aseveró que un millón de personas con discapacidad ya son derechohabientes de esta pensión, prioritariamente niñas y niños. Además de que también se protege a los jóvenes, la población indígena y a los más pobres de las ciudades. “Todo esto con una inversión para este año, de 20 mil millones de pesos”.
La secretaria de Bienestar recordó que se suscribió un convenio de colaboración con la Fundación Teletón, para que de esta forma se potenciara la infraestructura y la experiencia de sus especialistas, por lo que, gracias a esto, 19 mil niñas y niños, a través de 375 mil terapias, han disfrutado del Programa de Apoyo para la Rehabilitación y la Inclusión para el Bienestar de las Niñas y Niños con Discapacidad Permanente.
Además, subrayó que para garantizar los derechos de los más pobres, la Fundación Teletón y la Secretaría buscarán construir un CRIT en el corazón de la montaña de Guerrero, en el municipio de Tlapa de Comonfort.
Por otra parte, apuntó que el Programa Sembrando Vida, que tiene como principal objetivo garantizar la autosuficiencia alimentaria de las comunidades más pobres del país, inició en 2019 en ocho entidades de la República y actualmente se extendió a 21.
Recordó que, en 2019, se inició con un padrón de 225 mil sembradoras y sembradores; a junio de este año, ya suman 447 mil; y la inversión social en 2022, alcanzará los 30 mil millones de pesos.
Sembrando Vida, explicó, es un programa cien por ciento orgánico que, en medio del contexto de la escasez global de los fertilizantes, “es un logro que debe hacernos sentir orgullosos a todos los mexicanos”, porque implementaremos sistemas agroforestales y milpa intercalada, con árboles frutales, así como maíz y frijol.
Informó que se apoyó a 239 mil madres, padres y tutores, en beneficio de 250 mil infantes, además de que están incorporados a este programa mil niñas y niños que viven en condición de discapacidad.
Subrayó que las tandas fortalecieron la economía popular y apoyaron a las familias en la pandemia, sobre todo aquellas encabezadas por mujeres. “Es un timbre de orgullo que este programa está dirigido principalmente a ellas, porque siete de cada 10 beneficiarios son mujeres”.
Montiel Reyes agregó que el Programa para el Bienestar de las Personas en Emergencia Social o Natural, es una política de atención prioritaria dirigida a las personas que se encuentran en una situación de extrema vulnerabilidad, tanto por fenómenos sociales como por naturales.
Subrayó que 175 mil 500 familias han recibido apoyos hasta el mes de junio de este año, principalmente por fenómenos naturales como inundaciones, sismos, huracanes, entre otros. Incluso, “hoy mismo” iniciarán las tareas operativas para ayudar a los afectados del estado de Nayarit.
Indicó que el Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social es uno de los ocho fondos federales que componen el Ramo 33, y son recursos que la Federación distribuye entre las entidades federativas y municipios.
A través de este, apuntó, se financian obras de infraestructura social básica como son: agua potable, alcantarillado, drenaje, urbanización, electrificación de las zonas rurales y de las colonias pobres de las ciudades; también infraestructura básica del sector salud, educativo y mejoramiento de la vivienda.
Este año, puntualizó, cuenta con un presupuesto de más de 94 mil millones de pesos; 11 mil de ellos destinados a los estados y 83 mil millones para los municipios.